El Universal.
Ciudad de México. “La cuarta transformación de este país no ganará credibilidad si no es en boca de personas más agudas, más congruentes y mejor informadas que Rogelio Jiménez Pons (titular de Fonatur)”, asegura el artista Francisco Toledo en una carta dirigida a la opinión pública, en la cual evidencia la forma cómo el servidor público descalifica las críticas al proyecto del Tren Maya; y argumenta que los proyectos de “desarrollo” en la Riviera Maya y otras regiones turísticas han generado cinturones de pobreza y violencia en ciudades como Cancún.
Toledo señala además que el funcionario parece no estar enterado del calentamiento global catastrófico que enfrenta el planeta.
El reconocido artista y activista cuestiona el “modo tan indigno” que usa Jiménez Pons frente a los cuestionamientos serios a una iniciativa que describe como “plagada de incertidumbre”.
Su carta abre con una referencia a una entrevista que el funcionario concedió la semana pasada donde afirma que “un santón de la ecología” quiere parar el Tren Maya, sin entender, según él, que “no podemos ser a ultranza conservacionistas” en México, y que “el desarrollo va a tener afectaciones al medio ambiente, obvio”.
Por su parte, en la carta Toledo asegura:
“No nos sorprende la falta de respeto de esa persona hacia quienes pedimos que la nueva administración federal haga valer el derecho de las comunidades indígenas a dar o negar su consentimiento respecto a un proyecto que modificará radicalmente sus condiciones de vida. Lo que nos decepciona al leer la entrevista son las falacias que el funcionario aduce como argumentos. Por lo visto, el director del Fonatur no está enterado que los proyectos de ‘desarrollo’ en la Riviera Maya y otras regiones turísticas han generado cinturones de pobreza y violencia en ciudades como Cancún. Tampoco parece entender que el planeta enfrenta un calentamiento global catastrófico porque el ‘desarrollo’ está destruyendo la capacidad del ecosistema global para mantener la estabilidad climática, y que la conservación de áreas naturales es nuestra mayor esperanza de supervivencia.
“¿Cómo puede darse un diálogo constructivo, como lo demanda hoy el pueblo de México, si un servidor público intenta descalificar de modo tan indigno los cuestionamientos serios a una iniciativa plagada de incertidumbre? En nuestra opinión, la ‘cuarta transformación’ de este país no ganará credibilidad si no es en boca de personas más agudas, más congruentes y mejor informadas que Rogelio Jiménez Pons?”
Finalmente, viene la firma del artista Francisco Toledo, fundador del PRO-OAX.
Consultar a los jaguares. En entrevista con EL UNIVERSAL, Francisto Toledo manifestó su preocupación por lo que pasará con los jaguares a partir de la construcción del Tren Maya.
“Queremos ver qué va a pasar con los jaguares por el Tren Maya, qué plan de salvación va a haber para los animales. Creo que va a ser muy difícil para los jaguares este proyecto, los va a afectar”, manifestó.
Contó además que se hicieron subastas para salvar a los jaguares de Oaxaca, de una zona que colinda con Veracruz, donde todavía hay jaguares, que fueron muy exitosas y que incluso se le compró a un jaguar capturado un collar para seguir sus movimientos.
“¿Qué harán con los de la zona maya? Se sabe más o menos el número de jaguares en Chiapas, Oaxaca, Veracruz; queremos saber el numero de los que hay en Yucatán. Creo que consultar a la madre tierra y abrir un hoyo en la tierra está bien, pero (si es así ) lo que hay que hacer es consultar a los Señores de la Tierra, que son los jaguares, a ellos es a los que hay que consultarles si quieren tren o no quieren tren”, expresó Toledo.