Sin Embargo
La organización U.S. Pirg, con presencia en Estados Unidos y Canadá, detectó un incremento de hasta un 500 por ciento en las partículas de glifosato en cervezas y vinos de distintas marcas, entre ellas Heineken, Stella Artois y la mexicana Corona Extra, de venta en Estados Unidos.
El glifosato es la sustancia activa presente en los pesticidas vendidos por la empresa Monsanto. En entrevista con Efe, la especialista María Colín señaló que la sustancia está en la categoría de altamente peligrosa en la Unión Europea y otras partes del mundo, “pero en México no, aunque hay más de 180 sustancias consideradas en este rubro”.
Dicho componente fue detectado en 2015 por la Organización Mundial de la Salud (WHO, por sus siglas en inglés) como agente cancerígeno. El uso de este pesticida se ha incrementado hasta en un 500 por ciento en los cultivos de uvas y cebada, materia prima para obtener vino y cerveza.
El organismo de salud considera que es aceptable un nivel de 3.5 partículas por mil millones (ppb, por sus siglas en inglés) de glifosato. Sin embargo, el estudio de U.S. Pirg, revela que existen empresas de cerveza y vino que exceden por mucho esa referencia.
De acuerdo con la investigación de la asociación, cervezas como Coors Light con 31.1ppb, Heineken con 20.9, Budweiser con 27.0 ppb o Corona 25.1 ppb, así como los vinos Beringer Estates Moscato con 42.6 ppb e Inkarri Estates Malbec: Certified Organic con 5.33 destacan por representar un verdadero peligro para la salud de sus consumidores.
También hallaron presencia de glisofato en la cervezas Stella Artois (18.7 ppb); Stella Artois Cidre (9.1 ppb); Tsingtao Berr (49.7 ppb); Miller Lite (29.8 ppb); la irlandesa, pero de la embotelladora y distribuidora den EU, Guinness Draught (20.3 ppb); Ace Perry Hard Cider (14.5 ppb); New Belgium Fat Tire Amber Ale (11.2 ppb); Sam Adams New England (11.0 ppb); Sierra nevada Pale Ale (11.8 ppb); Samiuel Smith’s Organic Lager (5.7 ppb); Peak Beer Organic IP (no fue detectado el nivel).
US PIRG es una organización independiente de los consumidores en Estados Unidos. Emplea a cerca de 400 trabajadores administrativos, analistas de políticas públicas, científicos y abogados, y está activa en 47 estados de la Unión Americana, con una oficina de cabildeo federal en Washington, DC,
Desde 1970, la Federación de PIRG estatales de EU ha hecho activismo ciudadano orientado a resultados, se han enfrentado a poderosos intereses, ha utilizado herramientas de investigación ya ha hecho exposiciones en los medios de comunicación, organización de base, defensa y litigios para obtener resultados reales en temas trascendentales para la ciudadanía.
GLIFOSATO EN MÉXICO
La promotora legal de Greenpace México, María Colín, advirtió que la sustancia utilizada como herbicida y la cual, según un grupo de científicos tiene relación con el desarrollo de cáncer en humanos, no es considerado de alta peligrosidad en México.
En entrevista con Efe, María Colín explicó que en la “Unión Europea ya hay una discusión para que el glifosato sea retirado del mercado en cinco o 15 años”.
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En México, dice, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) hizo una recomendación a partir de una queja presentada por 40 personas y Greenpeace.
Sin embargo, la recomendación solo está basada en la reducción y eliminación progresiva del glifosato en el país, pero no dice nada sobre la peligrosidad del químico.
Recientemente, un grupo de científicos publicó en la revista Mutation Research “una compilación de muchos estudios que relacionan la exposición de glifosato por exposiciones acumulativas al Linfoma de No Hodgkin, un tipo de cáncer de sangre en humanos”, indica Colín.
De acuerdo con el estudio, que se hizo analizando a 54 mil personas que trabajan como aplicadores de pesticidas, esta sustancia aumenta el riesgo de padecer el Linfoma de No Hodgkin hasta en 41 por ciento.
Este no es el primer estudio que vincula al glifosato con el cáncer en humanos.
De hecho, detalla Colín, además de cancerígeno, está considerado como un disruptor endócrino y un químico que afecta el desarrollo de las personas.
Explica que los jornaleros agrícolas y sus familiares son los grupos que están más expuestos al glifosato, debido a que este es usado en los plantíos y, por ello, están más propensos a desarrollar cáncer.
Sin embargo, enfatiza la especialista, todos estamos expuestos de alguna manera “ya que los alimentos son una fuente de exposición a estos plaguicidas y por lo tanto estamos consumiendo glifosato“.
Pero este agrotóxico, que fue desarrollado durante los años 70 y pronto se volvió popular para eliminar las malezas, no sólo está presente en los cultivos: también es usado en parques y espacios públicos, advierte Colín.