Oaxaca de Juárez. La Delegación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca, advierte a la población en general a que extreme precauciones en esta temporada de calor, toda vez que aumentan en un 15 por ciento las infecciones gastrointestinales, en relación al resto del año. Por lo anterior, se requiere de mucha limpieza en la preparación y manejo de los alimentos, ya que las temperaturas elevadas producen su fácil y rápida descomposición, siendo los más afectados niños y adultos mayores.
Por lo general las enfermedades gastrointestinales producen diarrea (evacuaciones líquidas), vómito y en ocasiones fiebre y malestar general. Y en menores de seis meses de vida, se observa hundida su fontanela (“mollera”).
La coordinadora de Nutrición, Rocio Guadalupe Espinosa Castro, dijo que la transmisión de las bacterias, virus y parásitos culpables de estas infecciones es vía mano-fecal oral, por lo que una de las principales medidas de prevención es el correcto lavado de manos antes de comer y después de ir al baño, desinfectar correctamente las frutas y verduras, así como evitar comer en la calle o en lugares de dudosa higiene.
Asimismo, la especialista en nutrición recomienda evitar el consumo, en esta época de primavera y de calor, de embutidos como el jamón, las salchichas y salami, por ejemplo; y refrigerar los lácteos (quesos, cremas y leches), productos que tienen un mayor riesgo de descomponerse.
Explicó que es muy importante no dejar la comida durante horas a la intemperie, ya que esto incrementa el riesgo de que proliferen los agentes infecciosos y entren en proceso de descomposición los alimentos.
Agregó la especialista del IMSS que el 90 por ciento de las infecciones gastrointestinales se auto limitan, es decir, el propio organismo reactiva las defensas para atacar a los virus o bacterias causantes de la diarrea, por lo que sólo se requiere de medidas generales como reposo, abundantes líquidos para hidratar al paciente, principalmente electrólitos (Vida Suero Oral) y evitar comidas grasosas y ricas en carbohidratos.
Esta recuperación, dijo, no debe rebasar tres días, de lo contrario, si los síntomas empeoran y las evacuaciones se acompañan de sangre y/o moco, hay fiebre y datos de deshidratación (irritable, escasas lágrimas y orina, lengua blanca y poca salivación), por ello, es importante acudir con el médico o a la Unidad Médica del IMSS más cerna, ya que son síntomas de complicaciones que se requieren de tratamiento, principalmente con antibióticos, indicó Espinosa Castro.
