Una niña de 11 años dio a luz esta semana en el hospital general “Aurelio Valdivieso” de los Servicios de Salud de Oaxaca. El bebé nació por cesárea, pesó tres kilos y no se reportaron complicaciones durante el parto, refirió el reporte médico de la dependencia.
El alumbramiento sucedió el martes 16 de abril cuando ingresó al hospital ubicado en la zona norte de la ciudad de Oaxaca. La menor llegó acompañada por una persona del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF). En esa misma fecha cumplió 11 años de vida.
Este jueves ambos menores de edad fueron dados de alta y reinstalados en la casa hogar del DIF que, junto con Procuraduría Estatal de Protección de los derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de Oaxaca (Prodennao), resguarda a la víctima desde el octavo mes de embarazo y le da seguimiento a la carpeta de investigación por el probable delito de abuso sexual y violacióC
La Prodennao está facultada para denunciar ante el Ministerio Público dentro de las siguientes 24 horas de las que se tenga conocimiento de aquellos hechos que se presuman constitutivos de delito, además de solicitarle la imposición de medidas urgentes de protección especial cuando exista un riesgo inminente contra la vida, integridad o libertad de los infantes y adolescentes.
Al respecto, la organización feminista Muger (Mujeres Unidas en torno al Género, la Equidad y la Reivindicación), reclamó a las autoridades una investigación profunda que revele las omisiones por parte de quienes callaron ante la sospecha de la recurrencia de abuso sexual y violación de una niña.
Estamos hablando del hijo de una niña. Nunca debió de haber llevado a término ese embarazo, pero se violentaron los derechos humanos de la menor. Al tratarse de una presunta violación debió de haberse aplicado la Norma Oficial Mexicana (NOM) 046 que permite la interrupción del embarazo en los primeros meses, indicó Amanda Huerta Duarte, participante de la red feminista. Todos los delitos se deben de pagar con cárcel al responsable material, la negligencia de la familia por la denuncia tardía y a las autoridades omisas”.
En la cadena de omisiones también están los docentes debido a que ellos conocen los mecanismos, protocolos, rutas de protección elaboradas por el instituto de educación para saber cómo actuar frente a situaciones de abuso sexual, pero no actuaron, expuso Huerta.
Con la información de Excélsior