Con la construcción inminente del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles comenzó la especulación de terrenos adyacentes a la Base Aérea Militar número 1 Santa Lucía.
Los compradores de tierra de los municipios aledaños llegan a ofrecer entre 200 y 300 pesos por metro cuadrado; sin embargo, los ejidatarios aclaran que solo venderán sus tierras a 5 mil pesos el metro cuadrado “si la quieren… y si no, que ahí se queden”.
El tesorero del Comisariado Ejidal, Fabián Pineda, señaló que la tierra que poco les daba hoy vale miles de pesos y a 140 ejidatarios les quedan unas 240 hectáreas que pudieran vender, aunque advierte que se pondrán exigentes, pues, de acuerdo con habitantes de la zona, en los últimos meses han llegado intermediarios, bodegueros y empresarios en busca de tierra, pero ofrecen “una grosería”.
A pesar de que pocos trabajan esas tierras donde antes sembraban cebada, lechuga y maíz, los campesinos dicen que lo que más están buscando los compradores son terrenos para bodegas, y si quieren podrán obtener terrenos sobre la carretera México-Pachuca, pero no a menos de 5 mil pesos el metro cuadrado.
En muros, espectaculares y volantes se puede leer: “Venta de terrenos a un costado de la base aérea, posesión inmediata, facilidades de pago”, el número telefónico y la figura de un avioncito.
Lidia Alvarado Contreras, quien vive en el barrio de Santo Domingo Axolopan, dijo que se prevé ahí la instalación de ensambladoras aeronáuticas, por lo que ya han ido con algunos de los campesinos a quererles comprar sus tierras. Hay zonas donde se puede vender a 2 mil 500 o 3 mil pesos el metro cuadrado, “pero no en los 300 pesos que algunos han ofrecido”.
Fabián Pineda explicó que en Tecámac ya no hay mucha tierra ejidal, pero sí demasiada pobreza, drogadicción, delincuencia y pocas fuentes de trabajo, y la agricultura es escasa porque si siembran, alguien llega y les roba la cosecha.
“Dos compañeros reclamaron su cosecha y los recibieron a balazos; tuvieron que emigrar para salvarse”, relató el tesorero.
REMODELAN DEPARTAMENTOS
En ese contexto de especulación, cientos de departamentos de créditos de Infonavit, Fovissste o bancarios que han estado abandonados por años, ahora están siendo remozados para ponerlos en venta de nueva cuenta.
El presidente del Consejo de Participación Ciudadana, Arnulfo Díaz de la Rosa, informé que “ya los están reactivando, pues lógicamente la cuestión del aeropuerto detonó un mayor interés de los inversionistas”.
Hay unidades habitacionales como Residencial Rancho La Luz, de 840 departamentos, que se encuentra a unos 200 metros de la base aérea de Santa Lucía, que tiene 400 sin vender y 50 que fueron abandonados por sus propietarios.
Esta situación ha sido aprovechada por la delincuencia. Los presidentes de mesas directivas de vecinos de la zona denuncian que varias personas simplemente llegaron, vieron los inmuebles vacíos, grafiteados, con vidrios rotos, sin puertas ni ventanas, se metieron y los comenzaron a vender, y de eso han hecho un negocio lucrativo
Fabián Pineda explicó que en el fraccionamiento Santa Cruz vendieron y venden casas en 30 mil pesos, llegan familias, las compran, pero los mismos que se las venden después les roban o les hacen la vida pesada para que se salgan y luego las revenden. “No son organizaciones de PRI o PRD o Morena, son delincuentes, paracaidistas”.
Lo mismo sucede en la Unidad Habitacional Paseos de Tecámac, donde la presidenta del Comité, María Luisa Cabrera, afirmó que los departamentos en esa zona están vacíos porque sus propietarios solo van los fines de semana o simplemente ya no les interesó esa propiedad.
Según datos oficiales, las viviendas con crédito Infonavit abandonadas en municipios aledaños a Santa Lucía son: Zumpango, con mil 824; Huehuetoca 727; Tecámac, 241, y Nextlalpan, con 143.
Pese a ello, la primera subdelegada de Residencial La Luz, Mónica Juan Diego, confió en que con el nuevo aeropuerto se combata a la delincuencia, les amplíen puentes y vialidades, haya un mejor transporte y más áreas verdes, deportivas y culturales, aunque aún no les hayan dado a conocer el proyecto y no se les haya consultado.
Milenio