CJNG exige $500 a empleados o queman locales en Veracruz

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Excelsior

Si no pagamos la cuota, nos van a quemar la casa, ya aquí dice se les quemará y yo creo que ahorita con lo que pasó que andan quemando los negocios, lo pueden hacer, claro que lo pueden hacer esto es una amenaza”, dice empleado local.

Tenemos miedo porque pues más se están aprovechando de por si tenemos esa psicosis, ya quemaron El Caballo Blanco, toda esa gente que murió allá adentro y ahora vienen que van a quemar nuestra plaza, nuestra fuente de trabajo, que ahí comemos muchas familias.

Con gran temor y desesperación, de manera anónima una persona empleada de un local de la Plaza Constituyentes y La Fayuca, en Coatzacoalcos, Veracruz acudió a GRUPO IMAGEN para denunciar que un grupo armado los amenazó con quemar si no pagan una cuota.

Unos sujetos armados y vestidos de negro llegaron a entregarles varios papeles escritos a mano en donde les ponen la advertencia.

Dice, solo se les dará una oportunidad para marcar, no respondemos con lo que pueda pasar y les quemaremos su pinche casa, la plaza tiene dueño con las letras del CJNG y un número telefónico.

Incluso, esta persona que ya huyó de Coatzacoalcos, aseguró que han sido víctimas de cobro de piso desde hace varios años por parte de varios grupos delictivos.

Ya tenemos años pagando cuota, como 5, 6 años, va dependiendo, ellos ponen la cantidad, ahorita llegaron que querían $500 quincenales.

De repente llegan a cobrar unos, de repente llegan a cobrar otros y se les tienen que pagar, nosotros no podemos decirles que pagamos, tenemos que darles lo que ellos piden.

Sin embargo, no interponen denuncias porque no confían en ninguna autoridad y temen que les vaya a ir peor.

Hasta uno mismo se dan cuenta que ellos entrar a cobrar y como a los 15 minutos entra la policía entra como si nada, caminando por los pasillos como si nada y uno llega a la conclusión que los vienen vigilando.

Como consecuencia varios dueños y empleados de locales, que se dedican a la venta de productos como celulares, películas, juguetes, discos y ropa, han tenido que cerrar e irse de la ciudad, como ahora lo decidió esta persona.