UIF: desvío millonario en consejo de fomento al turismo

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La Jornada

La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) informó este viernes que una investigación hecha al Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) halló un posible desvío de recursos a cuentas personales y empresas en el extranjero.

El consejo era una empresa estatal con participación del sector privado, encargado de promover la imagen del país a nivel nacional e internacional.

Entre los espectáculos que financió el CPTM destacan el Gran Premio de México de F-1, la presencia de la NFL, con un juego de la temporada regular realizado en el estadio Azteca; la inversión en la película del agente 007 James Bond, Spectre, y la producción de Luzia, del Cirque du Soleil.

Santiago Nieto Castillo, titular de la UIF, instancia de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, indicó en su cuenta de Twitter que se analizó la información del CPTM que fue desincorporado de la administración pública por la Cámara de Diputados en julio pasado.

El funcionario comentó que coincidía con la posición de Miguel Torruco Marqués, titular de la Secretaría de Turismo (Sectur) acerca del mal uso que se le dieron a los recursos públicos asignados al CPTM.

De acuerdo con Torruco Marqués el consejo era usado como “caja chica” de los gobiernos en turno, como reveló una auditoría que se realizó al organismo, el cual fue creado en 1999 con el fin de diseñar las campañas de publicidad turística del país y para lo cual contaba con 21 oficinas en el extranjero.

Nieto Castillo adelantó en su mensaje que se presentarán denuncias en las instancias correspondientes por la existencia de “pagos superfluos y el posible desvío de recursos a cuentas y empresas en el extranjero”, aunque no detalló quienes pueden ser los probables responsables.

Los recursos del CPTM no provenían del presupuesto, sino del pago de derechos de los visitantes extranjeros, conocido como DNR. Del total de los ingresos con la etiqueta del DNR, se destinaba 70 por ciento al consejo.

La desaparición de la empresa de participación estatal mayoritaria fue una de las primeras decisiones del actual gobierno federal con el fin de ahorrar recursos a la federación en el contexto de su estrategia de austeridad, pero también como parte de la lucha contra la corrupción.