La Jornada
El gobierno mexicano estableció con Estados Unidos un grupo de trabajo para la localización de bienes de Joaquín El Chapo Guzmán, con el objetivo de lograr la extinción de dominio (tomar los bienes de delincuentes).
Lo anterior fue señalado por Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), quien participó esta mañana en la conferencia de prensa en Palacio Nacional, junto con Margarita Ríos Farjat, la directora del Sistema de Administración Tributaria (SAT) y el procurador fiscal, Carlos Romero Aranda, para hablar de las “redes” y “mafias” de defraudación fiscal, a partir de empresas simuladas y factureras.
Nieto precisó que la investigación tanto de Ovidio Guzmán (hijo de El Chapo) como de otros casos recientes deben mantenerse con el sigilo de ley.
Únicamente dijo que el grupo de trabajo bilateral de lavado de dinero y delitos financieros está coordinado por la Secretaría de Relaciones Exteriores, en el contexto de la lucha al narcotrafico.
A nivel doméstico “estamos en un proceso de revisión de información; se han presentado denuncias por parte de la Unidad de Inteligencia Financiera a la Fiscalía General de la República y generamos congelamiento de cuentas con muchos cárteles”.
Subrayó que la UIF no tiene sesgos políticos.
“Actuamos sin filias ni fobias y no hay persecución a ningún partido político y llevar los casos a la Fiscalía General de la República”, aseguró.
No hay ideologías en nuestro trabajo, indicó.
Nieto no dio detalles de ninguna investigación en curso, relacionada con funcionarios de la administración anterior, de Enrique Peña Nieto.
Los funcionarios del área fiscal y financiera precisaron el inicio de la investigación de un modelo de presunta defraudación que aplicaron, según las indagarías actuales, 135 empresas, con transacciones millonarias.