Impide mi regreso una alianza externa e interna: Evo

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La Jornada

¿Quién no quisiera volver a Bolivia? se preguntó Evo Morales Ayma quien se vio obligado a renunciar al cargo de presidente por un golpe de Estado al tiempo que denunció una alianza entre fuerzas externas e internas que operó en contra de su gobierno y que no desea su regreso al país andino.

En conferencia de prensa ofrecida ayer en un hotel al sur de la Ciudad de México lamentó que por decisiones políticas internas y externas no se le permita retornar a la nación sudamericana. Desde el norte nos informan que Estados Unidos no quiere que vuelva a Bolivia dijo.

El presidente en el exilio acusó al mismo tiempo a la derecha golpista de impedir su presencia en el país sudamericano. Están pidiendo a Naciones Unidas, a la Iglesia católica, a la Unión Europea que no vuelva Evo.

Apuntó que Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), así como la organización misma se sumaron al golpe de Estado. Ello evidenciado la madrugada del 10 de noviembre cuando la Misión de Observación Electoral de este organismo multilateral en Bolivia informó que tenía listo un reporte preliminar sobre la auditoría electoral de los comicios que se celebraron el 20 de octubre.

No fue un informe que se basara en los documentos y los aspectos técnicos jurídicos, agregó. Hemos visto que era una declaración política.

Para Morales Ayma el fondo de este conflicto político es haber nacionalizado los recursos naturales. Hay algunos gobiernos que siempre quieren adueñarse de las materias primas que no nos perdonan porque el Estado industrializa estos recursos naturales. Es una conspiración, no solamente interna sino externa en contra de las políticas que se basan en que el pueblo sea quien gobierne al pueblo.

Con miras a esclarecer la elección del 20 de octubre en su país, Morales Ayma invitó a organismos multilaterales, a la ONU, al jefe del Estado Vaticano, papa Francisco y a la misma Iglesia católica para formar una Comisión de la Verdad.

Aclaró que la Asamblea Legislativa boliviana no había tratado hasta ayer por la mañana el tema de su renuncia, por tanto sigo siendo presidente y además de eso soy presidente electo que ha ganado la primera vuelta y no tengo nada que ocultar.

No obstante, si la vía de la solución de la represión que se vive en Bolivia tras el golpe de Estado –la cual ha dejado un saldo de 30 personas muertas– es la realización de nuevas elecciones, Morales Ayma se inclina porque se lleven a cabo.

Aunque sigo convencido (…) que nosotros ganamos la primera vuelta en las elecciones. Todo por la paz para que haya un entendimiento, que haya nuevas elecciones. Calificó esta situación como un genocidio que cunde en el país sudamericano. En Bolivia están matando a mis hermanos y hermanas, condenó durante la rueda de prensa en la que estuvo presente también el canciller de su administración, Diego Pary Rodríguez, y quien llegó a la Ciudad de México hace tres días.

El presidente de Bolivia en el exilio confesó que extraña no estar desde las cinco de la mañana y hasta la madrugada los siete días de la semana en trabajo por la patria. “Extraño eso y esperamos que organismos internacionales nos permitan volver allá (…) Hay tanta forma de volver, espero que nos garanticen la vida, sólo espero eso. No tengo ningún miedo de tantas amenazas, amedrentamientos, ya conocemos esa historia. Cuando se trata por la patria, por la igualdad, por la justicia, todos hacemos ese esfuerzo para estar con el pueblo boliviano”.