De acuerdo con los datos del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA), en 2018 se conoció que el 35% de los alumnos mexicanos de 15 años no obtuvo el nivel mínimo de competencias necesarias para seguir estudiando en matemáticas, lectura y ciencias. Solo uno de cada cien se colocó en los niveles altos de desempeño.
La OCDE presentó resultados de su más reciente estudio PISA que se aplicó a 7 mil 299 estudiantes en México, datos escalables a un millón 480 mil 904 estudiantes de 15 años.
Dicho examen evalúa si se han adquirido los conocimientos y habilidades esenciales para la participación plena en la sociedad.
Los resultados más bajos entre los países de la OCDE son los obtenidos en matemáticas, en la que 56% de los estudiantes tuvo un desempeño menor al nivel 2, que es el mínimo de competencias que reconoce la OCDE; en lectura, este nivel llegó a 45% y en ciencias, a 47%. Esto quiere decir que entre cinco y seis de cada 10 estudiantes que se gradúan de la secundaria no tiene el conocimiento mínimo indispensable para estudiar la preparatoria.
Al comparar el desempeño con sus 36 socios de este organismo internacional México es el país peor evaluado: se encuentra en el fondo de la tabla, en el lugar 36 en lectura, en el 36 en matemáticas y en el 36 también en ciencias.
Así, en una escala de 200 a 800 México obtuvo 420 puntos en comparación con el promedio internacional de 487 en lectura; tuvo 409 en matemáticas en comparación con los 489 puntos de la OCDE, y 419 puntos contra los 489 que tuvieron los estudiantes de tercero de secundaria en ciencias en otros países.
Los resultados de la prueba que aplica la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) desde 2000 revelan que en los 18 años en los que México ha participado en las pruebas, se han tenido avances mínimos.
Algo que se destaca en estos resultados fue en los estudiantes que viven en condiciones de pobreza, donde algunos de ellos se colocaron en los niveles 2 y 3 de los exámenes, cuando el nivel dos es el mínimo aprobatorio. Esto se compara con otros jóvenes que cuentan con mayores recursos económicos, quienes no alcanzaron el nivel 2.
El Universal
