La Jornada
Al presentar en la conferencia de prensa en Palacio Nacional de este lunes los resultados de la consulta ciudadana en los municipios donde pasará el Tren Maya, para conocer si están de acuerdo con la realización de este proyecto, los cuales apuntan a un respaldo mayoritario para su construcción, el presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que en enero iniciarán las licitaciones para los primeros tramos donde ya existe una ingeniería básica.
Durante la consulta realizada el fin de semana en los 84 municipios donde pasará el tren participaron 100 mil 940 personas de dichas demarcaciones; 93 mil 142 votaron por el sí y 7 mil 517 por el no y hubo 281 votos nulos, explicó la subsecretaria de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos religiosos de la Secretaría de Gobernación, Diana Álvarez Maury.
Rogelio Jiménez Pons, directos del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), dependencia encargada del proyecto del Tren Maya, recordó que de los mil 460 kilómetros que contempla el trayecto, 730 kilómetros ya existen desde Palenque hasta Valladolid.
López Obrador dijo que el proyecto representará una inversión de 120 mil millones de pesos. Parte de ello se costeará con los 8 mil millones anuales que generan los ingresos por el cobro de impuestos a turistas, lo cual sumará alrededor de 60 mil millones de pesos de aquí a 2024.
El mandatario indicó que dichos recursos se “usaban para supuestamente promover el turismo, y se demostró que no se le daba ese uso, la mayor parte se usaba para publicidad del gobierno”. El resto será financiado con presupuesto público, sin generar deuda ni sistemas de asociación con la iniciativa privada.
La consulta
Para la consulta se montaron 268 mesas, en promedio una por cada 7 mil 500 habitantes mayores de 18 años. También se puso una mesa en poblaciones donde hay menos que esa cantidad de habitantes, agregó Álvarez Maury.
En Campeche votaron más de 34 mil; en Chiapas, más de 8 mil; en Quintana Roo, más de 27 mil; en Tabasco poco más de 13 mil y en Yucatán más de 17 mil 500. La funcionaria subrayó que con el proceso se consultó a las comunidades indígenas, así como a la población en general que pudiera verse beneficiada o afectada.
Por su parte, Adelfo Regino Montes, director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), señaló que a la par se realizaron 30 asambleas regionales y en comunidades indígenas, 15 de ellas el 29 y 30 de noviembre, en las que se proporcionó toda la información en cuatro lenguas del sureste: maya, chol, tzotzil y tzeltal. En dichas mesas participaron representantes de mil 400 comunidades indígenas.
En las primeras 15 mesas en comunidades indígenas participaron cuatro mil 800 autoridades y representantes originarios del 75 por ciento de las comunidades convocadas.
En las otras 15 asambleas regionales asistieron cino mil 237 autoridades de 987 comunidades indígenas, 70 por ciento del total de las comunidades convocadas.
Como resultado de dichas mesas, Regino afirmó que el pronunciamiento de las comunidades fue un apoyo y plantearon participar en este proyecto, y que sean atendidas sus demandas y exigencias en materia de desarrollo, así como certeza jurídica de los terrenos fuera del derecho de vía
Con las mesas, el gobierno cumple en lo que se establece en las legislaciones internacionales y el propósito de consultar a la ciudadanía, agregó Regino, quien entregó a López Obrador las 15 actas de las asambleas informativas y las 15 de las asambleas regionales.