Forbes
El gobierno de México denunció el viernes que fueron retenidos los automóviles de dos funcionarios españoles que visitaron su residencia diplomática en La Paz, ampliando una confrontación sobre la vigilancia al inmueble que se ha prolongado durante días.
Los diplomáticos españoles estaban a punto de abandonar el recinto cuando les informaron que sus vehículos habían sido detenidos en las inmediaciones y no se les permitían ingresar, dijo la Secretaría de Relaciones Exteriores de México en un comunicado.
La cancillería no dio detalles sobre los responsables de impedir el paso de las unidades, pero dijo que los funcionarios fueron auxiliados por un auto del gobierno de Bolivia que los ayudó a abandonar el sitio, donde se encuentran albergados nueve aliados del expresidente Evo Morales.
Desde hace varios días, México ha denunciado un incremento “exagerado” de la vigilancia policial alrededor de la representación diplomática, luego de que el mandatario mexicano Andrés Manuel López Obrador otorgó en noviembre asilo político a Morales.
El gobierno interino boliviano, liderado por Jeanine Áñez, asumió el poder tras la renuncia de Morales a la presidencia, después de la revelación de un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) que mostró irregularidades en los comicios de octubre en los que fue reelecto.
Sobre los hechos del viernes, Bolivia explicó por su parte que funcionarios españoles habían intentado ingresar de manera clandestina a la residencia diplomática de México, acompañados por personas encapuchadas.
La canciller del país andino, Karen Longaric, que forma parte del gobierno interino de Áñez, dijo en conferencia de prensa que enviará al gobierno de España una nota para denunciar “estos atropellos” y que reclamará el cumplimiento “riguroso de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas”.
El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España acordó abrir una investigación sobre los hechos ocurridos en Bolivia, informó la cartera en un comunicado.
