La Jornada
El gobierno federal y la industria farmacéutica eliminarán las trabas que afectan el abasto de medicinas y material de curación mediante la compra directa y sin intermediarios. El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, sostuvo que en el pasado reciente existía un conjunto muy reducido de empresas distribuidoras que controlaban el mercado porque tenían cartas de exclusividad con un amplio conjunto de proveedores.
Durante la conferencia matutina, López-Gatell mostró que la empresa PISA pasó de controlar 14 por ciento del mercado en 2013 a 24 por ciento en 2015 y 22 por ciento en 2018. Fármacos Especializados incrementó de 13 por ciento en 2014 a 20 por ciento en 2018. Insistió en que el desabasto en el Instituto Nacional de Neurología obedece al incumplimiento del proveedor, amparado en un contrato que vence en noviembre.
En entrevista en Palacio Nacional, adonde acudió para reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador, el dirigente de la Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin), Francisco Cervantes, señaló que mediante acercamientos el fin de semana se pactó con el gobierno federal garantizar el abasto de medicamentos y material de curación. Tras solicitar que no se estigmatice al sector farmacéutico, admitió que en los esquemas de licitación del pasado se incurrió en algunos excesos.
Explicó que se acordó la eliminación de intermediarios en el esquema de abasto, estimando que 300 empresas nacionales e internacionales estarán involucradas. Sin embargo, también indicó que la importación de medicamentos afectará negativamente a esta industria en México y, en consecuencia, a los empleos que genera.
–¿Harán alguna petición en el proceso de compra consolidada?
–No, ya se acordó. Es un tema de abasto en el Instituto de Salud para el Bienestar, el Issste, en el IMSS –respondió Cervantes.
Al dar a conocer El Pulso de la Salud semanal, en esta ocasión López-Gatell se enfocó en el fenómeno de los intermediarios que perturban las relaciones entre proveedores privados y el sector público como comprador mayoritario de los insumos para la salud, pues la carencia no es por falta de presupuesto.
Refirió que esto se reveló de forma clara en la visita que realizaron funcionarios de las secretarías de Salud y de la Función Pública al Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía.
Debido a que se trata de un organismo público descentralizado que tiene personalidad jurídica y patrimonio propios, y puede hacer las contrataciones de acuerdo con sus disposiciones internas, este instituto, para tener sus insumos, tiene un contrato vigente para el abastecimiento continúo de los insumos, que cubre hasta noviembre de 2020.
En el país operan mil 400 compañías farmacéuticas, de las cuales 10 son grandes empresas nacionales y otras tantas internacionales, tenían que canalizar sus ventas a través de intermediarios; y estas empresas distribuidoras a su vez subcontrataban con grandes compañías conocidas de distribución de productos.
El subsecretario señaló que otro mito que es importante quitar es que la razón de la escasez son los recortes presupuestales. No hubo recortes a los institutos nacionales de salud, pues casi en todos los casos se incrementó entre 5 y 7 por ciento el presupuesto, incluso el Instituto de Neurología recibió un aumento de 12 por ciento comparado con 2018.