La Jornada
La frontera entre Canadá y Estados Unidos seguirá cerrada para cruces no esenciales hasta el 21 de junio, como medida de combate al nuevo coronavirus, anunció este martes el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
La línea divisoria de ocho mil 900 kilómetros que separa a los dos países se cerró el 21 de marzo, aunque se mantuvo el intercambio de mercaderías.
En su conferencia de prensa diaria, Trudeau dijo que esta segunda extensión del cierre de la frontera era “importante para mantener seguras a las personas de ambos países”.
“Continuaremos observando cuidadosamente lo que está ocurriendo en otras partes del mundo y a nuestro alrededor mientras decidimos sobre los próximos pasos”, dijo el primer ministro, dejando abierta la posibilidad a nuevas prolongaciones.
Antes de la emergencia sanitaria, un promedio de más de 400 mil personas y bienes por alrededor de mil 700 millones de dólares cruzaban a diario la frontera.