La Jornada
Tras 15 días de hospitalización, inicialmente por un malestar en su columna que se complicó por la diabetes que padece, el obispo emérito de Tehuantepec, Arturo Lona Reyes de 94 años de edad, dio positivo a Covid-19, por lo que su estado de salud se reporta como “muy grave”, informó el padre Joaquín Galván, encargado de salud sacerdotal de la Diócesis de Tehuantepec.
Arturo Lona Reyes “El obispo de los pobres” llamado así por su labor altruista y solidaria con los pueblos originarios de Oaxaca desde hace 49 años de servicio, ingresó hace dos semanas al Hospital Médica Azul en Lagunas Oaxaca y ayer jueves tras practicarle una prueba de laboratorio, los datos arrojaron positivo a coronavirus.
Al conocer el diagnóstico, el longevo sacerdote fue ingresado al “área Covid de esa unidad médica en donde se encuentra muy grave de salud. Que la voluntad de Dios se cumpla en la vida del obispo de los pobres”, dijo Galván.
En 1952, Arturo Lona Reyes, tomó los hábitos del sacerdocio y el obispado el 15 de agosto de 1972 en la Catedral de Asunción de María de Santo Domingo Tehuantepec y desde entonces su lucha ha sido en la predicación, al empleo con la creación de cooperativas de producción y su mayor logro educativo, “La Universidad Indígena” en la zona mixe de la región del Istmo.
En el año 2000, se convirtió en obispo emérito, y desde la vida pastoral también fundó 15 bachilleratos maristas y también una universidad de la orden los jesuitas hace 13 años con la cual seis generaciones de jóvenes indígenas de la zona norte del Istmo han logrado seguir estudiando.
El líder religioso ha brindado asesoría y acompañamiento a los pueblos originarios, en especial a los que viven en resistencia con la llegada de megaproyectos mineros y eólicos al Istmo y también a la tala inmoderada que viven los zoques de Chimalapas.
Amigos y familiares han efectuado a través de las redes sociales cadenas de oración de forma recurrente para la mejoría de su salud.