Forbes
Durante 2020, con el confinamiento por la pandemia de Covid-19, el país registró la primera baja en el registro de homicidios desde 2015, pero crecieron los reportes de feminicidios y violencia familiar.
De acuerdo con cifras del Gobierno de México, los casos de homicidio doloso cayeron 0.4% en relación con 2019, al totalizar 29,157 casos, apenas 298 casos menos por debajo del año anterior.
En la conferencia de prensa matutina, el subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía, resaltó que diciembre pasado es el mes con el menor número de casos de homicidio en lo que va de la presente administración y el menor registro desde febrero de 2018.
Resaltó que más de la mitad de los casos se registran en 6 entidades: Guanajuato, Baja California, Estado de México, Chihuahua, Jalisco y Michoacán; asimimo, el 27% se acumula en 15 municipios, 4 de ellos en Guanajuato: León, Celaya, Irapuato y Salamanca.
No obstante la baja de 16 de los 18 delitos de alto impacto en 2020, durante el año pasado se incrementaron las carpetas de investigación de casos de feminicidio en 0.1%, al sumar 969 contra 968 del año anterior, según la presentación de datos en la conferencia presidencial “mañanera”.
Las entidades con mayores registros de este delito son el Edomex, con 151 víctimas, seguido de Veracruz, Jalisco, Ciudad de México, Nuevo León y Puebla.
De acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, ese incremento sería mayor en al menos 3%, pues en 2019 se registraron 940 casos con la última actualización al 20 de diciembre pasado.
En tanto, las carpetas de investigación sobre violencia familiar sumaron 210,158 en 2019 contra las 220,028 acumuladas en 2020, un crecimiento de 4.7%.
Este último delito se ha asociado a lo largo del año con el llamado a quedarse en casa por parte de las autoridades sanitarias, lo cual derivó en una mayor convivencia de las familias en condiciones de mayor tensión emocional y económica a causa de la contingencia sanitaria.
En contraste, los casos de robo total así como los de secuestro registraron caídas de 21.1 y 36.4% en relación con el año anterior. La mayor baja en el caso de los delitos patrimoniales se dio en el robo en transporte público colectivo, con 37.6%.
“En el robo de vehículos hay una clara tendencia a la baja que viene del arranque de la administración, es importante subrayarlo porque algunos quieren decir que es un tema de la pandemia, todos los delitos patrimoniales tienen una tendencia a la baja desde el arranque de la administración”, defendió Mejía.
Sin embargo, a causa de la pandemia se redujo la movilidad de las personas en el país para contener los contagios de Covid-19, lo cual se asocia necesariamente con el descenso de este delito.