Infobae
Un terremoto de 7,1 grados en la escala abierta Richter sacudió este sábado la costa de Fukushima, en el este de Japón, y se notó con fuerza en Tokio, sin que las autoridades niponas activaran por el momento la alerta de tsunami. Hasta el momento, 20 personas fueron reportadas heridas.
La mayoría de las lesiones se produjeron por caídas, según recogió la agencia de noticias japonesa Kyodo, que cita además a la Agencia de Regulación Nuclear de Japón que asegura que no ha recibido ningún informe anormalidades en las centrales nucleares de Fukushima I y Fukushima II. La agencia ha informado además de al menos nueve réplicas por encima de la magnitud 4 en la escala de Richter.
El seísmo tuvo lugar a las 23:08 hora local del sábado (14:08 GMT) con epicentro a unos 60 kilómetros de profundidad frente a la costa de la prefectura de Fukushima, según informó la Agencia Meteorológica de Japón.
Tanto en Fukushima como en Miyagi, en la costa noreste de Japón, el terremoto alcanzó el nivel de seis en la escala japonesa, con un máximo de siete y más centrada en las zonas afectadas que en la intensidad del temblor.
Otras prefecturas de la costa oriental y del centro de Japón se vieron también sacudidas con fuerza por el temblor, entre ellas la capital, donde se alcanzó el nivel 4 de la escala nipona.
La Agencia Meteorológica de Japón señaló que el sismo podría causar un leve aumento del nivel del mar, aunque no se ha activado la alerta de tsunami.
El Gobierno de Japón ha conformado “un equipo de emergencia” para recopilar la información y coordinarse con las autoridades locales “con la prioridad de salvar a posibles víctimas”, señaló en una conferencia ante los medios el portavoz del Ejecutivo, Katsunobu Kato.
La compañía energética Tokyo Electric Power (TEPCO) señaló que no se han observado “anormalidades significativas” en los niveles de radiación en las plantas de Fukushima Daiichi y Daini, que se encuentran inactivas y en proceso de desmantelamiento a raíz del terremoto y el tsunami de marzo de 2011.
Alrededor de 950.000 viviendas se han quedado sin suministro eléctrico en a raíz del terremoto en diversas áreas del país, según los datos ofrecidos por las compañías operadoras.
Además, varias líneas de trenes de alta velocidad (shinkansen) que operan en el noreste de Japón han suspendido sus operaciones debido a los apagones.
En Fukushima y Miyagi se han registrado por el momento varios incendios, uno de ellos en una fábrica, así como una avalancha de tierra sobre una autopista que podría haber dejado coches atrapados, según los medios nipones, que también recogen un balance temporal de una decena de heridos en incidentes relacionados con el seísmo.
A pesar de que de momento el terremoto no parece haber arrojado daños de consideración, el primer ministro de Japón, Yoshihide Suga, ha convocado una reunión extraordinaria de su gabinete de emergencia.
Tras la reunión, el primer ministro ordenó al Gobierno que realice una evaluación de los daños del terremoto, que coordine la respuesta de rescate, si fuera necesaria, y que publique la información que pueda interesar a la población.
La zona fue escenario en 2011 de la mayor catástrofe natural de la historia reciente de Japón, cuando un seísmo de magnitud 9 y la posterior ola gigante dejó más de 15.000 fallecidos y provocó una crisis radiactiva sin precedentes en la central nuclear de Fukushima.
Los terremotos son comunes en Japón, una de las áreas con mayor actividad sísmica del mundo. El país representa alrededor del 20% de los terremotos del mundo de magnitud 6 o más.