El Economista
Para el cuarto mes del año la economía mexicana, medida a través del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), registró un rebote histórico de 21.4% anual, con cifras desestacionalizadas, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Lo anterior, de acuerdo con analistas, se debe a un efecto base de comparación ya que el año pasado, ante el cierre temporal de negocios y confinamiento por el Covid-19, la economía cayó 19.9% en el mismo mes.
“Este elevado crecimiento se debe a un efecto matemático de baja base de comparación, ya que en abril del 2020 se aceleró el cierre de actividades no esenciales por la pandemia del Covid-19. Al realizar la comparación con respecto al nivel pre pandemia, esto es febrero del 2020, el indicador muestra una contracción de 1.29%”, indicó Gabriela Siller, directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base.
Con el dato de abril la economía suma dos meses consecutivos de crecimiento, algo que analistas prevén continúe los siguientes meses ante el avance de la campaña de vacunación, así como la reapertura de la actividad económica.
“La recuperación económica seguirá explicándose por el relajamiento de medidas sanitarias y la sólida demanda externa, aunque prevalecen riesgos en lo que resta del año, como una tercera ola de contagios en algunas entidades, o que las disrupciones en la producción industrial tarden más en solucionarse”, dijo Alejandro Saldaña, subdirector de Análisis Económico de Ve por Más (Bx+).
De acuerdo con el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE), para mayo habría un crecimiento económico de 24.8% anual.
En su comparación mensual, el IGAE mostró una contracción de 0.2 por ciento.
Industrias, con el mayor dinamismo
Dentro del reporte del Inegi se observó que las actividades secundarias, que engloba el sector de las industrias, tuvieron un crecimiento de 35.7% anual, explicado por un crecimiento de 50.2% en las industrias manufactureras, mientras que la construcción creció 44.6 por ciento.
El sector terciario, por su parte, presentó una expansión de 17% en comparación con abril del 2020.
Dentro de esta actividad, los servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas, que se vieron severamente afectados por la pandemia el año pasado, presentaron un crecimiento de 156.3 por ciento.
En el caso del sector primario, mostró un decrecimiento anual de 0.1%, el segundo consecutivo.