Agencias
Ucrania acusó el lunes al ejército ruso de haber cortado de nuevo la electricidad en la central nuclear de Chernóbil, situada al norte de Kiev y escenario del peor desastre nuclear del mundo en 1986, que ahora está bajo control ruso.
Las autoridades ucranianas indicaron la víspera que habían restablecido el suministro eléctrico de la antigua central, que aún necesita energía para garantizar la seguridad de los elementos combustibles allí almacenados.
«Pero antes de que la energía se restableciera por completo, las fuerzas de la ocupación dañaron la línea que alimenta la planta nuclear de Chernóbil», dijo el lunes el operador ucraniano de las instalaciones, Ukrenergo, en Facebook.
Ukrenergo afirma que sus técnicos habían reparado una línea de alta tensión que abastecía Chernóbil y la ciudad de Slavutitch. Pero esta línea volvió a sufrir daños y más empleados tendrán que volver al lugar para repararla.
Por la noche, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) indicó en Twitter que las autoridades ucranianas le informaron de que «la alimentación eléctrica externa» fue «restablecida hoy después de que la línea hubiera sido dañada de nuevo por las fuerzas de ocupación».
«El personal retomó las operaciones para reconectar la central a la red eléctrica», precisó el OIEA. Rusia no ha reaccionado a la acusación hasta ahora.
El reactor número 4 de la central de Chernóbil explotó en 1986, provocando el peor desastre nuclear civil de la historia. Está cubierto por un doble sarcófago, uno construido por los soviéticos, ahora dañado, y otro, más moderno, inaugurado en 2019.
Los otros tres reactores de la central se cerraron gradualmente tras la catástrofe, el último en el año 2000. Sin embargo, sigue siendo necesario un sistema de alimentación eléctrica para refrigerar los 20 mil elementos combustibles almacenados en la piscina del emplazamiento.
Dado el tiempo transcurrido desde el accidente de 1986, «la carga térmica de la piscina y el volumen de agua de refrigeración son suficientes para garantizar una eliminación eficaz del calor sin electricidad», estimó el 9 de marzo el OIEA.
Por otro lado, la agencia nuclear ucraniana Energoatom acusó también este lunes a los militares rusos de detonar municiones cerca de un reactor de la central nuclear de Zaporiyia, en el sur de Ucrania, bombardeada el 4 de marzo y ocupada desde entonces por los rusos.
Durante las explosiones, «el personal tuvo que dejar sus lugares de trabajo», escribió Energoatom en Telegram.
La agencia no ofreció informaciones sobre el nivel de radioactividad del lugar tras las explosiones. Energoatom afirmó que 11 representantes de la agencia nuclear rusa Rosatom se encuentran actualmente en el lugar y «participan» en estos actos.
«La agencia rusa está violando todas las normas y requisitos de la seguridad nuclear internacional», acusó Energoatom, que pidió al OIEA que actuara para evitar «una catástrofe que Rusia está preparando para todo el planeta».