Este 14 de abril se conmemora el Día Mundial de la lucha contra la enfermedad de Chagas, una afección parasitaria, sistémica y crónica, que de no atenderse oportunamente puede provocar alteraciones cardíacas, neurológicas, así como ocasionar la muerte.
Ante ello, los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), exhortan a la población a realizar saneamiento básico dentro y fuera de las viviendas, encalamiento de paredes, revisar periódicamente techos de lámina, palma, madera, pliegues de colchones, armarios, y eliminar escombro, leña y otros materiales que se tengan en los hogares, donde pueda esconderse el insecto llamado “chinche besucona”.
Al respecto, la Jefa del Departamento de Vigilancia Epidemiológica de la institución, informó que al corte de la semana epidemiológica número 13 del presente año, se tiene el registro de ocho casos confirmados por el Laboratorio Estatal de Salud Pública (LESP) Oaxaca.
De los cuales, tres corresponden a la fase aguda y cinco a la crónica; del total cuatro pacientes son residentes de la Mixteca, dos de Tuxtepec, uno de Valles Centrales e igual número en la Costa. Cifra que ubica a la entidad en el quinto lugar a nivel nacional.
Destacó que este 2022, se han hecho los esfuerzos para impulsar la detección, notificación y vigilancia del padecimiento, principalmente en las zonas históricamente más afectadas, de ahí que se tiene un incremento en la identificación de los pacientes, en comparación con el año pasado, periodo que cerró con un total de seis positivos a la enfermedad, de los cuales, cuatro pertenecen a Valles Centrales, uno a la Costa y uno más a la Mixteca, además se notificó una defunción asociada al vector.
La funcionaria explicó que la enfermedad de Chagas se transmite a los seres humanos cuando el insecto se alimenta de la sangre de las personas y deposita sobre la piel o mucosas su excremento, el piquete causa comezón y al rascarse se contamina el sitio con el material fecal que contiene al parásito Trypanosoma Cruzi.
Detalló que esta patología consta de dos fases, aguda y crónica, en la primera aparece una roncha que en ocasiones pasa desapercibida o se confunde con otro piquete de animal, puede provocar fiebre o infección en la zona afectada; en un porcentaje menor de pacientes aparece una inflamación del párpado, (en caso de que el parásito haya entrado por el ojo y cuando la persona se talla con las manos que estuvieron en contacto con las heces de la chinche).
La etapa crónica se presenta años después de la infección inicial, en donde provoca cardiopatías, hipertensión arterial, infecciones en la sangre, coágulos, problemas en los riñones e hígado, entre otros. Por ello es conocida como una enfermedad silenciosa, enfatizó.
De ahí que recomendó a la población acudir al médico para confirmar o descartar la patología a través de un análisis de sangre, en caso de encontrar al vector en las viviendas o al presentar una lesión de la picadura del insecto.
En este sentido, resaltó que en las Unidades de los SSO se puede acceder a la atención, diagnóstico y tratamiento de manera gratuita, para evitar complicaciones a la salud, ya que es curable si se detecta oportunamente y a través del apego y seguimiento médico.
Por ello, la dependencia redobla esfuerzos para reducir los riesgos de transmisión, mediante el fortalecimiento de la vigilancia epidemiológica, la notificación de casos, la promoción de la limpieza de las viviendas, la emisión de información y concientización sobre la enfermedad.
