Agencias
De a poco, el mundo comienza a despedir el 2022 y a darle la bienvenida al 2023. En Auckland, Nueva Zelanda, recibieron el Año Nuevo con un deslumbrante show de fuegos artificiales y luces desde la Sky Tower. Hace un año, el festejo fue cancelado.
En Australia también se reunieron cientos de miles, para celebrar el primer Año Nuevo sin restricciones contra el Covid-19 desde el inicio de la pandemia, en 2020.
Los organizadores decidieron que el elemento principal de la fiesta de Fin de Año sería la inclusión, por lo que se preparó una cascada con los colores del arcoíris. Desde lo alto del Puente del Puerto de la ciudad se lanzaron más de 7 mil fuegos artificiales, además de otros 2 mil desde la Ópera.
Es la “fiesta que Sydney se merece”, dijo Stephen Gilby, productor de grandes eventos y festivales de la ciudad, en declaraciones al diario The Sydney Morning Herald.
En Melbourne, la segunda ciudad más grande de Australia, los organizadores prepararon una sesión de pirotecnia para las familias a lo largo del río Yarra al atardecer, antes de un segundo pase a medianoche.
En China se organizaron celebraciones en la Gran Muralla en Beijing, mientras que en Shanghái las autoridades cortarán el tráfico a lo largo del Bund para permitir que los transeúntes se reúnan en el paseo en Nochevieja. El parque de diversiones Disneyland de la ciudad ofrecerá un espectáculo pirotécnico especial para recibir el 2023.
La nación insular de Kiribati, en el Pacífico, fue el primer país en entrar en 2023, una hora antes que sus vecinos de Nueva Zelanda.
