Augusto RAMÍREZ
Denunciar de manera pública la pretensión del Regidor de Obras Públicas y Desarrollo Urbano y de Centro Histórico del municipio de Oaxaca de Juárez, Pavel Renato López Gómez, de pretender que se suspende el cambio de uso de suelo y el otorgamiento de licencias en áreas protegidas como los cerros del “Fortín” y El Crestón”.
Los activistas, Nasario García Ramírez y René Hernández, denunciaron públicamente las amenzas de las cuales fueron presa.
En redes sociales, los activistas del Colectivo de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO) denunciaron las amenazas de las cuales fueron víctimas.
“Ya inicio la maquinaria de la represión.” Manifestaron en la red social donde expusieron que por “su oposición” a que el cerro del Crestón y el Fortín, sean invdido” por acaparadores secundados por el regidor de MORENA, pavel Renato López Gómez, son amenazados.
“Hoy recibí amenazas telefónicas e igualmente el compañero René Hernández, por ello responsabilizamos de lo que llegase a sucedernos al Gobierno del Estado, al Gobierno Municipal, al Regidor de Obras públicas municipales y a los acaparadores de tierras”.
Así lo refieren los activistas quienes reiteran tener la razón.
“El Fortín y el Crestón son el patrimonio natural de los Oaxaqueños y si nos van a desaparecer. Vale la pena la lucha. Ya se nos agredido y aún así hoy seguimos presentes”, dijeron los afectados.
Cabe hacer mención que el interés de hacer efectivo el cambio de uso de suelo, como el otorgamiento de permisos, deja importantes ganancias al gobierno municipal a la par de otorgar concesiones a los acaparadores de tierras que por años han venido invadiendo las áreas naturales protegidas y la federación.
VIOLAN DECRETOS
Una muestra de ello ha sido la violación a los lineamientos de conservación del Centro Histórico, donde la delegación estatal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) por años ha sido complice.
El pasado fin de semana, en el Corazón de la Ciudad DE Oaxaca, una denuncia pública puso una vez más en evidencia la actuación del INAH y el gobierno de la ciudad, una construcción en un edificio catalogado dejó al descibierto la complicidad que por años ha existido y que ha servido para modificapr el entorno de la Ciudad Patrimonio de la Humanidad.
De ahí han salido las amenazas contra ambientalistas y quienes defienden el patrimonio de la ciudad, sobre todo pa pquienes han puesto de manifiesto que quienes en la “Primavera Oaxaqueña” son incapaces o desconocen lo que es la cpapital del estado.
