Alfredo Martínez de Aguilar
La ciencia política enseña que la política es la eterna historia de las traiciones y también el inicio de la guerra por otros medios, parodiando el concepto más provocador de Karl von Clausewitz.
Ejemplo de ello es la contaminación del intento de reelección de Chico Neri, como lo conocen en su natal San Andrés Zautla, por las consecuencias de la crisis de la basura en el actual proceso electoral.
La falta de solución del “basurazo” tiene efecto político-social multiplicador, a pesar de tirar más de 250 millones de pesos en paliativos con su traslado a sitios autorizados en otras entidades vecinas.
La deslealtad de sus amigos y colaboradores más cercanos, por negligencia y probable corrupción, podría sepultar las aspiraciones reeleccionistas del presidente municipal de Oaxaca de Juárez.
Nada de extraño tiene que inmerso en la guerra por la reelección, los adversarios de Chico Neri capitalicen a su favor sus graves errores y le pasen la factura político-electoral. No hay sorpresas.
Poco importa y cuenta que al parecer las encuestas lo ubiquen bien posicionado en las preferencias electorales porque de ser así realmente podría buscar la senaduría o la diputación federal.
Como Espada de Damocles pende la amenaza de los habitantes de la colonia La Joya de Pueblo Nuevo, de boicotear el Segundo Informe de Chico Neri el próximo sábado, en la Plaza de la Danza.
El desempeño de Chico Neri, caracterizado por la actitud de dejar hacer y dejar pasar, ha detonado una serie de conflictos innecesarios, como el saqueo de 800 vehículos en el Encierro Primavera.
La mayor traición interna se da en la crisis de la basura por falta de decisión para enfrentar legalmente el estallamiento por consigna de la misma, por el edil de Zaachila, Rigoberto Chacón.
La persistencia de la emergencia sanitaria se ha convertido en una guerra ambiental entre pueblo y Gobierno Municipal, como ocurre en los últimos días con los bloqueos en Hacienda Blanca y Viguera.
Los vecinos inconformes bloquean los cruceros de Hacienda Blanca y Viguera por la contaminación del depósito de residuos en un predio privado; aunque las autoridades aseguran que no es así.
Es de lamentar que los bloqueos en la carretera 190 generen pérdidas millonarias, retraso en actividades laborales y escolares, y un golpe a los bolsillos de los ciudadanos que trabajan día a día.
Los vecinos de La Joya denuncian que el jardín de niños y la escuela primaria “Miguel Hidalgo” han informado de afectación a la salud de los escolares; exigen el retiro de los residuos y los camiones.
El presidente del COMVIVE de la colonia La Joya, Jorge Hernández Gómez, demanda retirar el material tirado en un predio particular porque que ha provocado olores fétidos en toda la zona.
Se unen más colonias para cancelar el tiradero. “El olor es muy fuerte, tóxico y desagradable; se buscaron los canales adecuados para la atención del problema, pero las autoridades fueron omisas”.
Un factor que complica la solución de la crisis de la basura para Chico Neri es no estar en el ánimo del gobernador Salomón Jara por el rescoldo de jugarle las contras al apoyar a Susana Harp.
La crisis de la basura, que dura ya un año, se ha agravado por la disputa de los sindicatos de transportistas vinculados al crimen organizado, por el traslado de basura a otros estados vecinos.
Los intereses oscuros en juego son de tal dimensión y magnitud que, incluso, han provocado la ejecución del encargado del centro de transferencia, Óscar Omar Castellanos Ángel, “La Cachorra”.
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