Para Edith Méndez Méndez la donación de órganos le dio una oportunidad de vida porque a más de 20 años de recibir un riñón de su madre, ella también tuvo el privilegio de dar vida. Hoy tiene un hijo con esa edad. Y su madre de 68 años vive plena sin problemas de salud.
Llamó a no tener miedo al momento de decisión sobre donar o no, “no tengan miedo, creo que no ha habido tanta donación porque la gente cree que si dona un riñón ya no va a vivir el tiempo que creen vivirían”.
Donar órganos y tejidos con fines de transplante es prolongar la vida de otras personas, finalizó Edith Méndez al dar su testimonio de vida sobre el beneficio de recibir un riñón.