A unos metros del Auditorio Guelaguetza donde la iglesia católica celebraba la asunción de Monseñor Luis Alfonso Tut Tún como Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Antequera, y al pie de la estatua de Benito Juárez, impulsor de la libertad de creencia, un grupo de evangélicos exigieron alto a la intolerancia religiosa en la entidad.
Liderados por pastores que integraron la comisión negociadora que se reunió en la agencia de San Lorenzo con el representante de la @SEGO_Oax sin la presencia de autoridades de San Isidro Arenal que optaron por retener a 3 evangélicos y acordar la expulsión de todos de la comunidad, pidieron respeto a la libertad religiosa en la tierra de Juárez.
Rechazaron poblaciones donde no se respeta la libertad de expresión, “No a las comunidades que queman templos”, exigieron tras recordar que la casa de oración de la ranchería Cerró Cajón en San Isidro Arenal fue incendiada el pasado 6 de agosto.
Azael Ramírez Miguel, apoderado de la Iglesia Cristiana Interdenominacional, consideró que en la presente administración no cumple con garantizar la libertad de creencia, además de minimizar el problema que representa la intolerancia religiosa “diciéndonos que no pasa nada”.
Y narró las vejaciones a las que fueron sometidas las tres mujeres evangélicas en San Isidro Arenal por parte de autoridades y pobladores.
🪅 Miguel Luna