Tres policías de la SSP cursaron su educación secundaria en el IEEA

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Fernando García Valeriano, Rigoberto García García y Perfecto Pacheco Vásquez, policías integrantes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Oaxaca, en este año 2015 terminaron sus estudios básicos en el Instituto Estatal de Educación para Adultos (IEEA).

 

Los tres elementos policíacos, que además de salvaguardar el orden público del estado, forman parte de la Banda de Música de la SSP, durante seis meses cursaron su secundaria con el sistema educativo para adultos. Alternando entre equipo de seguridad, instrumentos musicales y libros, dos veces a la semana se reunían con su asesora para adquirir, compartir y analizar conocimientos útiles para su vida laboral, familiar y social.

Entrevistados al final de su ensayo artístico manifestaron que el estudiar abre muchas puertas para progresar en la vida, sin tener que invertir recursos económicos, porque el material y el servicio educativo se los otorgan de manera gratuita.

Fernando García Valeriano es originario de San Mateo Macuilxóchitl, donde aprendió solfeo y a tocar el Saxofón Barítono Segundo, lo que le dio la oportunidad de incorporarse a prestar sus servicios musicales y de vigilancia en la corporación policíaca.

 

El padre de dos hijos, manifestó que su familia fue el principal impulso para realizar sus estudios de secundaria, quienes además lo apoyaban en sus tareas escolares y lo festejaron al concluir sus estudios.

“Los módulos educativos que más me gustaban eran los de matemáticas, creo que porque se parecen a la escritura musical; con este logro, ya me dieron ganas de estudiar el bachillerato y seguirme superando”, detalló.

En tanto,  Rigoberto García García,  clarinetista de la citada banda musical y procedente de San Juan Guelavía, reconoció el apoyo recibido de parte de los mandos superiores de la Secretaría de Seguridad Publica y del Instituto Estatal de Educación para Adultos, que le brindaron las facilidades para poder estudiar en las Instalaciones de la corporación, al combinar las labores de policía, músico, padre y estudiante.

“Ser policía no es fácil, hay que enfrentarse a situaciones de peligro, ante todo se tiene que proteger la vida e integridad de la población oaxaqueña. Para poder estudiar, antes tenía que cumplir con las actividades asignadas en el cuartel, en la calle y en la casa, además había que hacer tareas para no atrasarse en el aprendizaje, pero también implica proveerse de conocimientos útiles para mejorar en el trabajo”.

Explicó que terminar la educación básica en el IEEA lo impulsó a continuar estudiando y  actualmente cursa la Educación Media Superior, misma que piensa terminar para posteriormente buscar alguna beca o apoyo que le permita estudiar una licenciatura, ya sea en Derecho o en Música.

Así también, Perfecto Pacheco Vásquez, quien lleva 25 años tocando Corno Francés en la Banda y desempeñándose como policía, aseguró que el estímulo para prepararse ha sido su único hijo, quien desea estudiar Artes Plásticas y está convencido de que con mayores conocimientos podrá conseguir un ascenso laboral con mejores ingresos.

El también habitante de la población de Macuixochitl destacó: “para hacer bien las cosas se requiere de mucho sacrificio, nosotros tenemos una doble vida, servir en el trabajo y en el hogar, estamos preparados para las emergencias, en cualquier momento tenemos que participar en operativos policíacos”.

Enfatizó que en las labores de seguridad, las actividades musicales y educativas fue primordial el apoyo mutuo y el compañerismo que se generó en el Círculo de Estudio, donde todos se apoyaban para cumplir con sus obligaciones laborales y avanzar hasta concluir la secundaria.

Los tres policías ocupan el rango “A”  y esperan subir un escalafón más, ya que el cumplir con las obligaciones, obtener méritos laborales y tener mayor nivel educativo son las formas en que pueden ascender en su trabajo.

Aseguraron que el apoyo del Director de la Banda, Calixto García Baltazar, fue vital para concluir su educación básica, pues les brindó las facilidades para conjugar sus actividades laborales con el estudio, así como la paciencia y esfuerzo de su asesora Dolores Genoveva Santiago, que explicaba de manera detallada y ejemplificaba los temas para su mayor comprensión.

Finalmente, los servidores públicos expusieron que  los desvelos y esfuerzos realizados para avanzar en sus estudios, el acudir a  asesorías, presentar exámenes y sobre todo no descuidar las labores policiales, la asistencia a presentaciones musicales y compromisos familiares, fueron recompensados al recibir sus certificados de estudios.