Atendiendo a las instrucciones del mandatario estatal, Gabino Cué Monteagudo de preservar el patrimonio cultural para que las futuras generaciones puedan valorar lo que ha formado nuestra cultura a través de generaciones pasadas, la Secretaría de las Infraestructuras y el Ordenamiento Territorial Sustentable (SINFRA), a través del Instituto del Patrimonio Cultural (INPAC), concluyeron la restauración del Templo del Ex Marquesado.
Por tal motivo, este día el director general del INPAC, Jorge Alberto Valencia Arroyo, hizo entrega del acta de entrega recepción del inmueble en cuestión al Presbítero del Templo de Ex marquesado, Alejandro Rodríguez González.
El Templo de Santa María del Ex Marquesado, es un conjunto arquitectónico insertado en el centro Histórico de la ciudad de Oaxaca, por lo que se propuso el proyecto de restauración integral en el inmueble, rescatando así el valor que representa cada espacio que lo conforma y todas sus características que son únicas.
En este sentido dentro de los principales objetivos de la conservación del bien inmueble, se encontró el respetar la autenticidad del sitio perteneciente al patrimonio cultural, mediante el sustento de dictámenes técnicos para la elaboración de proyectos integrales de restauración, fundamentados con base a los tratados de restauración.
De acuerdo con el director general del INPAC, Jorge Alberto Valencia Arroyo, “la propuesta de intervención del inmueble se realizó bajo los criterios de intervención, tratando de establecer y priorizar las áreas y elementos que contienen un valor histórico para su conservación”, mismas que representaron una inversión de 2 millones y medio de pesos, otorgados a través del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas, FAFEF 2014.
“Cabe destacar que este inmueble no había sido atendido durante más de 60 años, por tal motivo desde el año 2014, el Instituto del Patrimonio Cultural del Estado de Oaxaca se dio a la tarea de realizar trabajos para subsanar cada uno de los daños que presentaba el Templo, en esta etapa se ejecutaron trabajos tanto en la cubierta del templo y la intervención del curato, como una primera etapa”, refirió Valencia Arroyo.
Asimismo agregó que los deterioros que presentaba se encontraron principalmente en el extradós de la cubierta, la cual había sido afectada por el intemperismo al que está expuesto y que causaba filtración de humedad en el interior del edificio, provocando desprendimientos de aplanados y de pintura vinílica, dañando claramente el material de fábrica de la cubierta.
Dentro de los principales trabajos, se llevaron a cabo la erradicación de flora nociva en extradós de cubierta, así como la sustitución total de enladrillados entortados y rellenos.
“Para esto se consolidaron cada una de las grietas que se descubran al realizar los trabajos de liberación y se sustituyeron aquellas piezas que hayan perdido su capacidad de carga o se encuentre en mal estado de conservación, se colocaron además rellenos aligerados en el área de riñones y se integraron al final enladrillados de media tabla colocados en petatillo y siguiendo la forma de las bóvedas y cúpulas del inmueble, con una capa de impermeabilizante hidrofugante” detalló el responsable de la conservación del patrimonio cultural en la entidad.
En lo respecta a los pretiles, en ellos se realizó la consolidación y enrrace de los mismos, sustituyendo aplanados en mal estado, las bajadas de aguas pluviales se rehabilitaron y se sustituyeron aquellas gárgolas que se encontraban en mal estado.
En el área destinada al curato se llevó a cabo una intervención integral, contemplando desde la intervención de la cubierta, sustituyendo rellenos y enladrillados; además de la consolidación de grietas, sustitución de aplanados en mal estado en muros, así como la sustitución de pisos e integración de pintura vinílica en muros al interior.
