Por: Miriam Aguilar
Defensores de los derechos humanos junto con el padre Alejandro Solalinde Guerra y el pastor evangélico Sergio Hernández Palomec, realizaron una ceremonia litúrgica y un recorrido por las calles de la ciudad Ixtepec, para despedir a las madres migrantes centroamericanas que arribaron el pasado viernes a esta localidad en busca de indicios de sus hijos desaparecidos.
Mientras avanzaba la caravana de las madres migrantes en compañía de cristianos evangélicos, entonaban cantos, dando gracias al Señor por darles fortaleza para mantener viva la esperanza de encontrar a sus hijos y seguir en su búsqueda
El padre Alejandro Solalinde indicó que, dicho recorrido culminó en las vías del tren ya que es un lugar que simboliza, el paso migratorio.
Asimismo señaló que, la caravana de migrantes es representativa, como un “golpe a la conciencia” de las y los mexicanos y un “golpe al hígado” al gobierno Mexicano, ya que es en territorio de México donde están desapareciendo “hermanos centroamericanos”.
Añadió que, gracias a las caravanas se han podido reencontrar unos 250 hijos con sus madres.
Por su parte, el pastor evangélico Sergio Hernández Palomec, reiteró que, cuando se trata de ayudar al prójimo no deben existir fronteras, ni diferencias; es por ello que están unidos por la sociedad y por quienes más lo necesitan.
La caravana visitó los penales de Juchitán, Tehuantepec y Matías Romero, así como la fosa común de la Subprocuraduría Regional de Juchitán, detrás del panteón municipal de Juchitán “Domingo de Ramos”.
La caravana se dirigirá al municipio de Arriaga, Chiapas para después trasladarse a Tapachula el próximo 18 de Diciembre” Día internacional del migrante”.
