Por La Jornada
Las alianzas electorales de PRD y PAN podrían realizarse en seis estados, donde se privilegie Oaxaca y la búsqueda de consensos; aún no se descartan Veracruz, Puebla y Tlaxcala.
Dirigentes de expresiones perredistas distantes confiaron ayer en que Agustín Basave se mantenga al frente del partido y se sume el lunes, durante la reunión del Comité Ejecutivo Nacional, al esquema de negociación con el PAN que aprueben las corrientes. Hasta ahora, lo firme es en Zacatecas y Durango.
René Bejarano, dirigente de Izquierda Democrática Nacional, expresó que hay condiciones para la negociación entre las tribus perredistas.
“Nadie debe aferrarse a lo que uno quiere que salga, es un asunto de estrategia… He platicado con líderes de otras expresiones y creo que habrá un buen acuerdo”, afirmó.
Expresó su respaldo al liderazgo de Agustín Basave, quien, confió, va a cumplir con su responsabilidad, porque para eso protestó el día que se le nombró.
Adelantó que su corriente apoyará en todas las entidades con los candidatos que el partido postule, en alianzas y sin alianzas; actuaremos institucionalmente y no en función de un solo equipo, sino de un proyecto conjunto.
Por su parte, Alejandro Sánchez Camacho, secretario de Acción Política Estratégica, no descartó que la negociación con el PAN sea sobre la base de seis estados y que cada partido se reparta por igual el nombramiento de candidatos a gobernador.
Una posibilidad es que el PRD designe a los abanderados en Oaxaca, Zacatecas y Tlaxcala, y que el PAN lo haga en Durango, Veracruz y Puebla. Esa sería la posibilidad, no se descarta y se antoja de equilibrio.
Hasta ahora, sin embargo, las diferencias en el partido se mantienen, porque Basave quiere ocho estados, apoyado por el grupo Galileos y Nueva Izquierda, y esta última no ha descartado Tamaulipas e Hidalgo. Otras corrientes se pronuncian por entre cuatro y seis alianzas.
El senador Luis Sánchez, de Alternativa Democrática Nacional, lamentó la advertencia de Basave de renunciar a su cargo si se le desautoriza su esquema de negociación. Eso jamás fue una condición para que él aceptara la presidencia del partido, aclaró.
Apuntó que en el caso de Veracruz ellos se mantienen en contra de que Miguel Ángel Yunes pueda ser postulado a la gubernatura. La cauda de corrupción que arrastra no nos permite en absoluto apoyarlo en una candidatura, afirmó.
Guadalupe Acosta Naranjo, del grupo Galileos, señaló que una buena negociación interna daría respaldo al mandato de Basave y dejaría satisfecho al conjunto de expresiones.
Dijo que no puede haber un acuerdo donde no se encuentren Oaxaca y Tlaxcala. “Los compañeros –que se oponen a ocho alianzas– deberán entender que a lo que Agustín no le parece es que no se incluya Tlaxcala en el acuerdo”.
La apuesta de los perredistas es que en alianza con el PAN –acuerdos que han venido trabajando desde 2010– podrían recuperar los gobiernos de Tlaxcala y Zacatecas, así como refrendar un triunfo en Oaxaca.
