Por Excelsior
OAXACA, Oax.- “Yo me siento orgullosa de ser negra. Me gusta ser negra”, dice Yadira Melo. “Nos debemos sentir orgullosos de tener esta piel y este cabello y no debemos permitir que nos discriminen”, secunda Hebert. Ambos son de la localidad de Collantes, que en 2013 albergó la primera celebración por el Día del Pueblo Negro Afromexicano de Oaxaca.
Si México es un país pluricultural y multiétnico no hay razón para que los derechos del pueblo negro no sean reconocidos constitucionalmente, afirma el coordinador de la Alianza para el Fortalecimiento de las Regiones Indígenas y Comunidades Afromexicanas (África) A.C., Israel Reyes Larrea.
En el Día Internacional para Eliminar la Discriminación Racial, sostiene que el pueblo negro, con presencia mayoritaria en la región de la Costa de Oaxaca, no tiene por qué ser “invisibilizado”, negado, olvidado y discriminado.
“Los gobiernos federal y estatal deben empezar a pagar esa deuda histórica porque (el pueblo negro) contribuyó a forjar el México de hoy.”
Reyes Larrea expone que si bien los pueblos indígenas son los originarios de estas tierras, los negros llegaron con los españoles y participaron en el asentamiento previo a la formación de México como país independiente.
“Si para los pueblos indígenas su presencia ancestral fue un argumento muy importante para el reconocimiento de sus derechos, ese mismo argumento puede ser utilizado para reivindicar que desde la Conquista existe la población negra en México”, remarca.
“No es una afrenta”
“No nos podemos identificar por la lengua, pero sí por el color”, cuenta una niña de Santiago Tapextla, y una mujer de la localidad de José María Morelos enfatiza: “Para nosotros no es una afrenta que nos llamen negros”.
En 2013 el Congreso estatal aprobó el artículo uno, que prohíbe la discriminación, el racismo y la xenofobia, y con la reforma al artículo 16 se reconoce la composición multiétnica, multilingüística y pluricultural de Oaxaca.
“Dicha reforma constitucional, en su momento, abrió la puerta para el reconocimiento del pueblo negro afromexicano y sus comunidades, de sus derechos y cultura”, dice Humberto Hebert Silva, jefe del Departamento de Atención al Pueblo Afromexicano de la Secretaría de Asuntos Indígenas.
En ese mismo año se aprobó la Ley para Atender, Prevenir y Eliminar la Discriminación en el estado, que sirvió para sentar las bases para el reconocimiento de los pueblos afro de Oaxaca.
Sin embargo, el reconocimiento constitucional del pueblo negro, incluido en el cuerpo de la iniciativa de reforma a la Ley de los Derechos de los Pueblos Indígenas y Afromexicano de Oaxaca, está en la congeladora del Congreso local desde 2014.
“Se vive una discriminación institucional en todos los sentidos para miles de oaxaqueños indígenas y negros, que sin la aprobación de la nueva ley continúan en el rezago y en el olvido”, dice Hebert Silva.
Para el Consejo Consultivo de Pueblos Indígenas y Afromexicano a nivel nacional y estatal hay vacíos, como que las solicitudes para infraestructura, servicios médicos, salud, educación, agricultura o pesca de los pueblos negros no son atendidas porque no se contemplan el financiamiento a las comunidades en las reglas de operación.
“Sólo hay programas de apoyo para grupos indígenas. El pueblo negro está en una situación de doble discriminación por ser una minoría étnica”, anota Reyes Larrea
El difícil día a día
“Es complicado para nosotros como afrodescendientes convivir con las personas, puesto que nos ponen barreras para conseguir trabajo, para circular tranquilamente por la calle, para divertirnos, para entrar a lugares, conseguir escuela y muchas otras cosas”, relata Juanita, de Pinotepa Nacional. “La Policía Federal, los Agentes del Instituto de Migración me han pedido cantar el Himno Nacional Mexicano para constatar mi nacionalidad”, comenta a su vez Eder, de Santa María Cortijo.
Reyes Larrea dijo que el reconocimiento constitucional del pueblo negro implica la mejoría de sus condiciones de vida y su inclusión en los planes y programas de gobierno, federales y estatales.
En 2013 el gobernador Gabino Cué instituyó el 19 de octubre como el Día del Pueblo Negro Afromexicano. Se celebró por primera vez en la Costa y Cué afirmó que se empezaban a reconocer los derechos de quienes por décadas han sido relegados.
