Integrantes del Frente Indígena de Organizaciones Binacionales (FIOB) en California, expresaron en un comunicado su respaldo a los docentes mexicanos que se oponen a la reforma educativa.
La señalaron como una “imposición del gobierno mexicano que busca que empresas privadas lucren con todo el proceso de la educación”, así como “una maniobra que acaba de tajo con varios beneficios en materia laboral” que han logrado los maestros mexicanos.
A continuación, el comunicado íntegro:
Los miembros del Frente Indígena de Organizaciones Binacionales (FIOB) en California, Estados Unidos, nos manifestamos en solidaridad con el movimiento de maestros en todo México, que se están movilizando en oposición a la llamada Reforma Educativa que en el fondo es una medida impuesta para privatizar la educación, desaparecer las normales rurales y acabar con el sindicalismo independiente y crítico, en beneficio de las camarillas que han convertido al país en tierra de asesinatos masivos, violencia desenfrenada e impune y rampante corrupción.
A nuestro parecer, la llamada reforma educativa es una imposición del gobierno mexicano que busca que empresas privadas lucren con todo el proceso de la educación desde la aplicación de las evaluaciones a los alumnos hasta la producción de material didáctico, y que relega a los profesores a un papel de facilitadores y pretende reducir la educación de los estudiantes a contenidos de videos tomados de las redes sociales, por ejemplo.
Bien sabemos que más que una reforma interesada en la excelencia pedagógica, la reforma impuesta en México busca acabar con la educación básica gratuita como un derecho de los mexicanos consagrado en la constitución.
Los exámenes a los profesores son una maniobra que acaba de tajo con varios beneficios en materia laboral logrados por parte de los maestros organizados en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), y conseguidos a base de grandes luchas de más de tres décadas, en contraposición con la tendencia del sindicalismo oficialista del gremio nacional representado por el SNTE, creado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y cuya líder de varias décadas Elba Esther Gordillo, estuvo encarcelada bajo cargos de crimen organizado.
Como migrantes indígenas, nosotros contribuimos a través del envío de remesas, al financiamiento para la operación de las escuelas en nuestras comunidades. En todos nuestros pueblos, los padres de familia pagan la luz, el agua y el mantenimiento de las escuelas. En la mayoría de los pueblos indígenas, la comunidad es la que construye y arregla las instalaciones escolares ya que los recursos que supuestamente deben ser destinados a la educación quedan extraviados en el camino o pasan a ser parte de las fortunas de los gobernantes en turno.
Los maestros son quienes históricamente han estado más cerca de nuestras comunidades y participan activamente en la defensa de nuestros derechos como pueblos indígenas. Varios de los compañeros dirigentes de nuestra organización, el FIOB, también son profesores.
Por todo lo expuesto, la lucha de los maestros en Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Michoacán y el resto del país, nos afecta a los migrantes. Con mucha preocupación vemos que el gobierno federal mexicano encabezado por Enrique Peña Nieto sólo busca imponer a toda costa un modelo educativo sin haber tomado en cuenta el parecer de los docentes. La administración de Peña Nieto no se presta a dialogar con los profesores y sus representantes sino que por el contrario, ha empleado la violencia y la mano dura. Por algo el Secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer se ha ganado el sobrenombre de “Sargento Nuño”.
Creemos que si así como el gobierno mexicano busca descalificar a los profesores con sistemas de evaluación que los maestros consideran llenos de irregularidades, el gobierno también debería someterse a una riguroza evaluación, seguramente reprobaría. Los migrantes indígenas en California reprobamos al gobierno de Enrique Peña Nieto porque no ha sido capaz de presentar con vida a los 42 estudiantes y futuros maestros de Ayotzinapa y como lo ha señalado la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, México (para nosotros son las autoridades no el país como tal) registra un récord de violación de derechos humanos.
Una administración marcada por miles de personas masacradas, torturadas, ejecutadas, desaparecidas, y con miles de actos de violencia en contra de periodistas, mujeres, migrantes, indígenas y maestros, es una administración reprobada.
Los miembros del FIOB exigimos que el gobierno respete los derechos de los maestros a la libertad de expresión, manifestación y tránsito, cese la represión en su contra y de marcha atrás a la actual reforma educativa e implemente una política de educación que no responda a los intereses de compañías sino que proporcione educación científica que forme ciudadanos con capacidades acordes a los tiempos y con visión por la humanidad y no solamente a favor de intereses de una minoría voraz, corrupta y únicamente capitalista.
¡Qué viva la lucha de los maestros!
Por el Respeto a los Derechos de los Pueblos Indígenas, FIOB
Los Angeles, California. Junio del 2016.