Milenio.
Ciudad de México. El operativo de desalojo de la autopista Oaxaca-México, a la altura del poblado de Nochixtlán el 19 de junio, se hizo debido a que la refinería de Pemex en Salina Cruz se encontraba al ciento por ciento de su capacidad de almacenamiento.
Así lo dio a conocer Roberto Campa, subsecretario de Derechos Humanos de Gobernación, quien reveló que un día antes del intento de desalojo en este punto carretero se llenaron pipas con gasolinas, diésel y turbosina, a fin de desahogar el material que se encontraba en esa planta.
En El asalto a la razón con Carlos Marín, explicó que por razones de seguridad, debido al riesgo que implicaba mantener las pipas cargadas y estacionadas, se decidió liberar el bloqueo de Nochixtlán que mantenían pobladores y maestros de la CNTE.
“La planta de Pemex estaba al ciento por ciento de su capacidad de almacenamiento, por un lado había necesidad de sacar lo que se produce. Había que sacarlo para atender una región que se abastece de esta planta. “El día anterior (del operativo de desalojo) se toma la decisión de abrir un flujo de pipas de gas para descargar un poco del material de gas que estaba en la planta. Se llenan un conjunto de pipas y se tenía que tomar la decisión de dejarlas cargadas o sacarlas… la determinación es a partir de razones de seguridad por el riesgo que implicaba tenerlas paradas”, detalló.
Campa explicó que en caso de no desahogar el material que ya se encontraba almacenado en la refinería Antonio Dovalí Jaime, ubicada en Salina Cruz, se iban a detener operaciones, lo que “implicaba un costo enorme, porque para volver a arrancar requiere mucho tiempo”. Abundó que el sábado 18 de junio ya habían sido liberados 11 bloqueos carreteros; sin embargo, destacó la importancia “estratégica” del cierre que se tenía en la autopista en Nochixtlán, donde se llevó a cabo un enfrentamiento entre activistas y fuerzas estatales y federales, con un saldo de siete muertos.
“Nochixtlán es un cruce de caminos: cuando la gente viene de Oaxaca, en Nochixtlán toma la decisión de ir hacia Puebla por Tehuacán o de venir a la Ciudad de México, no hay manera de pasar si no es por este cruce”, explicó. También relató que en la reunión que sostuvo hace un par de jueves con una comisión de pobladores de Nochixtlán, familiares de víctimas e integrantes de la CNTE, los maestros plantearon como primer tema abrogar la reforma. —¿Cómo? ¿En primer término derogar la reforma educativa? Me extraña porque hubo muertos, heridos, y estando ahí los pobladores como que una demanda de carácter político podría pasar a segundo término, cuestionó Marín.
—Efectivamente. Se planteó como primer punto el tema magisterial, nosotros dijimos que ese no era tema de esta mesa. Entonces la petición que me hicieron fue escucharlos, solamente para enmarcar sus demandas.
“En algún momento, sobre todo en la segunda parte de la reunión, frente a una exigencia, un grito sobre el tema de la reforma, los familiares de las víctimas pidieron respeto y atención al tema, y lo hicieron de manera reiterada durante la reunión. Pero fue un planteamiento inicial y a partir de ahí entramos a otros”, abundó. Habló sobre la queja presentada por el Confederación Patronal de la República Mexicana ante la CNDH contra las autoridades por los bloqueos hechos por la coordinadora, al argumentar que violan los derechos humanos a la libre circulación, abasto de alimentos, educación, entre otros. “La mayor parte de las veces en las que se mueve la autoridad son márgenes muy estrechos, hay evidencia suficiente, conviene agotar esos márgenes, tiene costos sin duda, y la utilización de la fuerza pública son costos que se ven, entonces la decisión es agotar el diálogo para buscar una salida por esa vía”, dijo.