Rodrigo Islas Brito/RIOaxaca.
Oaxaca de Juárez. En un resultado que no sorprendió a nadie Jorge Bueno Sánchez fue nombrado por el municipio de Oaxaca de Juárez con el cargo honorifico de cronista de esta ciudad capital en sustitución de Rubén Vasconcelos Beltrán.
“Son tiempos difíciles. Son de los momentos donde inicia el trabajo de un cronista. A veces hacemos nuestra propia crónica de nuestra propia vida”.
Dijo a bote pronto Bueno Sánchez al ser entrevistado por los medios al término de la sesión de cabildo donde su nombramiento se hizo efectivo.
Aseguró que esta “es una encomienda de mucha responsabilidad”, en “tiempos de conflictos, de diferencias que tienen que tener una solución”.
De los proyectos que abordará en conjunto con el municipio, el ingeniero refirió que existen “una cauda enorme en Oaxaca de ilustres desconocidos”.
“Hombres que hicieron grande a esta ciudad, hay que saber más de la vida de todos estos hombres que aparecen como ciudadanos distinguidos, como oaxaqueños inolvidables“.
Recordar a quienes no tuvieron el título de cronista porque este no existía en el ayuntamiento, como Javier Castro Mantecón, Guillermo Reimer Fenoquio, Jorge Fernando Iturribarria y Everardo Ramírez Bohórquez.
Mencionó a los militares que le han dado su vida al estado como José María Ordaz o Manuel Sabino Crespo y Calleja, además del abogado e historiador Carlos María de Bustamante, a los que llamó “beneméritos del estado que deben darse a conocer y que hay que escribir sobre ellos”.
De si esperaba su nombramiento, cantado por muchos, dijo que “uno no espera nada”. Argumentó que ha dedicado cuarenta años de su vida a escribir sobre Oaxaca, en periódicos, la radio, series de televisión, conferencias y presentaciones de libros
Dijo que tiene libros que no se han podido publicar, y que espera “publicarlos en años que vendrán mejores”.
De Oaxaca expresó que le gusta su cultura y su pasado. “No me gusta que no respetemos nuestra propia ciudad, agredimos a nuestro presente, inconformándonos podríamos manifestar algo, pero manifestarse se convierte hoy en día en agresión a terceros”.
“Oaxaca es la conformación de la naturaleza, del cielo, de los ciudadanos que nos la han heredado. Oaxaca en su conjunto, es reserva espiritual de la mexicanidad, es el reducto que queda en México de saber que es México”.
Soltó un ya inspirado cronista para recordar después que “Oaxaca cambia desde su primer trazo de 1529 de Adolfo García Bravo. Su población crece y decrece por los temblores, por los sismos”.
Reflexionó en que Oaxaca fue una ciudad virreinal, con un mestizaje de 300 años que fue un choque brutal entre dos culturas que aún no ha sido comprendido.
“Nosotros somos el hibrido” dijo el nuevo cronista de la ciudad, ponderando que en este siglo 21 para su labor se tendrá que apoyar en los medios de comunicación y en el ciudadano
“Cronos es tiempo. Ser congruente con nuestro presente, darlo a conocer en un tiempo, en una crónica”.
¿Dónde podrá el público encontrar sus crónicas?, se le pregunta a Bueno, quien tras trastabillar dos segundos, recomienda:
“Si todos los medios y los periodistas nos dan la oportunidad de hablarles yo con mucho le enviaré, no en forma de boletín, sino en forma personal, el darles información de todo lo que necesitan”.
