La Jornada.
Ciudad de México. Con el registro de 2 mil 186 homicidios dolosos durante mayo pasado, el país alcanzó la cifra récord de este delito, comparado con los resultados mensuales de 1997 a la fecha.
El nivel actual es mayor a la cúspide inmediata anterior de 2 mil 131 asesinatos intencionales, alcanzada en mayo de 2011, en el último tramo del gobierno de Felipe Calderón.
Los registros de homicidios dolosos de mayo de 2017, significan a su vez la muerte en hechos violentos de 2 mil 452 personas. Acorde con las carpetas de investigación, la mayoría de los asesinatos son cometidos con arma de fuego. Bajo esta perspectiva, en México fallecieron cada día 81.7 personas en sucesos violentos.
Las cifras anteriores son distintas porque en una misma averiguación previa, abierta en las procuradurías y fiscalías estatales, se puede incluir más de un fallecimiento. El mayor número de muertes de este tipo ocurridas en mayo sucedieron en el estado de México, con 225 casos. Le siguen Guerrero, con 216, y Baja California, con 197. Por tamaño de la población de cada entidad, la mayor tasa continúa en Colima (31.69 casos por cada 100 mil habitantes).
Le siguen Guerrero, con tasa de 26.47; Baja California Sur (donde se ubica el importante polo turístico de Los Cabos), con índice de 20.87, y muy pegado a este nivel, la fronteriza Baja California, con 20.62.
Los datos anteriores son compilados por el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) de la Secretaría de Gobernación, con base en información que le hacen llegar las autoridades estatales.
El primer registro es de enero de 1997, tiempo en que el acumulado de homicidios dolosos fue de mil 410.
La primera vez que se alcanzó el nivel de los 2 millares fue durante el lapso de mayo a agosto de 2011, con cifras mensuales de entre 2 mil 9 a la mencionada cúspide de 2 mil 131. En ese periodo se vivía la situación más complicada en la llamada ‘‘guerra’’ contra el narcotrafico.
El mes pasado, el presidente Enrique Peña Nieto admitió la existencia de una situación complicada, que advertía el eventual retroceso a indicadores adversos del pasado.
Durante el actual sexenio, el máximo de este indicador había sido en marzo pasado, con 2 mil 21 homicidios dolosos, delito considerado de alto impacto y frecuentemente vinculado a los movimientos de la delincuencia organizada.
En cuanto a víctimas de secuestro, la información difundida ayer por el SNSP muestra variaciones. En lo que va del año 568 personas denunciaron haber sido plagiadas. En enero fueron 111 y en mayo pasado se repitió exactamente la cifra.
Sin embargo, el país experimenta también aumentos de robos en casi todos los órdenes. En abril, el número nacional de hurtos denunciados fue de 51 mil 94 y, en mayo llegaron a 55 mil 322. Hay avances negativos en robo de vehículos con y sin violencia, así como en casos de robo a transeúnte y casa habitación. También hubo aumentos en lesiones y homicidios dolosos y culposos.
