Alfredo Martínez de Aguilar
Oaxaca de Juárez. Una vez más se confirma que Oaxaca, estado y capital, es tierra de permanente contradicción. Un día después del tequio a favor de Oaxaca, convocado por el gobernador Alejandro Murat, continúa el tequio en contra de Oaxaca y los oaxaqueños, para sabotear las fiestas de La Guelaguetza.
Es un coctel altamente explosivo. Participan organizaciones sociales vinculadas a los grupos armados que operan en Oaxaca, especialmente los grupos radicales de la Sección XXII de la CNTE y de la Coordinadora Estudiantil Normalista del Estado de Oaxaca (CENEO).
A ellos, se suman grupos de choque de sindicatos de centrales charras con presumibles vínculos con el crimen organizado y el narcotráfico, así como la evidente mano negra de los ex gobernadores Diódoro Carrasco, Ulises Ruiz y Gabino Cué. Todos contra Oaxaca.
No es, por tanto, nada fortuito el estallamiento, una vez más, de la violencia entre los activistas de Comuna, dirigida por Flavio Sosa Villavicencio, y los milicianos del Frente Popular 14 de Junio, comandados por Don Panchito, en la Colonia Vicente Guerrero y Guillermo González Guardado.
El enfrentamiento a balazos, piedras y palos, entre activistas y milicianos de Comuna y los sicarios del Frente Popular 14 de Junio arrojó, un saldo oficial de un herido, cinco autos quemados, dos motocicletas y dos camionetas; y cinco casas incendiadas, aunque en realidad fueron 20 las casas quemadas, entre éstas la de Javier Martínez, hijo de “Don Panchito”.
La Fiscalía General del Estado (FGE) y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSP) extrañamente han guardado silencio sobre la muerte de Jesús Rivera Díaz, de 44 años de edad, dada a conocer por medios de comunicación de la Ciudad de México.
La frivolidad, soberbia y protagonismo de algunos servidores públicos, como el secretario de Seguridad Pública, José Raymundo Tuñón Jáuregui, echan gasolina al fuego, toda vez que cómodamente desde un helicóptero ‘evaluó’ el enfrentamiento entre los pobladores de la Colonia Vicente Guerrero y los integrantes del Frente Popular 14 de Junio.
Además, el Capitán Tuñón ordenó retirar con gas lacrimógeno el bloqueo de los vecinos de la Colonia Vicente Guerrero, apoyados por Comuna de Flavio Sosa, en el crucero de las carreteras a Ocotlán y Zimatlán, hartos del cobro de piso, extorsiones, levantones, secuestros, violaciones y homicidios del Frente Popular 14 de Junio, lo que no ha hecho con los bloqueos de éste.
No se necesita tener más de dos dedos de frente para concluir que hay mano negra que mueve la cuna de la violencia en el reinicio de la escalada de acciones desestabilizadoras, subversivas y hasta terroristas en la capital oaxaqueña, en una mezcolanza de oscuros intereses.
El ex gobernador Diódoro Carrasco combatió de manera sangrienta a la guerrilla del Ejército Popular Revolucionario (EPR) tras su asalto a Tlaxiaco y Huatulco, y hoy coinciden en atentar contra Oaxaca y los oaxaqueños; Ulises y Gabino fueron enemigos políticos a muerte, hoy, los tres coinciden en enfrentarse a los Murat, José y Alejandro.
Hay, desde luego, intensa actividad del crimen organizado y del narcotráfico que fundadamente se sospecha han infiltrado a las secciones más violentos de transportistas de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y del Sindicato Libertad.
Prueba de ello, finalmente trascendió el conflicto por el manejo del millonario presupuesto de las obras públicas entre el presidente municipal panista de San Pedro Pochutla, Víctor Cruz Vásquez, y los dirigentes regionales de la CTM, los hermanos Luis Manuel y Abizaid Vázquez Sánchez.
Ambos hermanos mantienen el control de las cuentas municipales de Pochutla y varios municipios de la región, desde donde presuntamente realizan operaciones con recursos de procedencia ilícita, de lo cual la PGR ya tomó conocimiento, por lo que inició la investigación interviniendo las cuentas bancarias del Ayuntamiento de San Pedro Pochutla
El hecho que Abizaid Vázquez Sánchez, quien estuvo sujeto a proceso por homicidio, lleve los destinos de las cuentas municipales provocó molestia y temor entre los denunciantes, razón por la cual decidieron acudir a la PGR, ya que aseguran no es posible que un municipio y menos sus finanzas se encuentren en manos de este tipo de personas, según información enviada desde el correo “Pegaso PGS” pegasusinfodatos@gmail.com.
Reportes de inteligencia de organismos militares y civiles revelan que actualmente los taxistas y mototaxistas son los principales distribuidores de drogas en Oaxaca, particularmente, en la zona metropolitana de Oaxaca, conformada por la capital y los 22 municipios conurbados.
Por otro lado, a quienes hipócritamente se rasguen las vestiduras y pongan el grito en el Cielo y nieguen que se trata de acciones subversivas y terroristas, recalcamos que en el estrangulamiento de la capital oaxaqueña hay evidente logística guerrillera.
De ninguna manera es casual y sí causal que la ubicación de los bloqueos en cruceros estratégicos, altamente vulnerables, obedece a la lógica subversiva de sembrar terror entre la población y más si se dan enfrentamientos a balazos.
Ahí están los activistas y milicianos de la organización fachada Sol Rojo, manipulada por el ex guerrillero Felipe Edgardo Canseco Ruiz, que mantienen bloqueados tres puntos carreteros en el estado de Oaxaca para exigir atención a su pliego de demandas.
Felipe Edgardo Canseco Ruiz, que opera en Santa María Atzompa, es hermano de Constantino Alejandro Canseco Ruiz, conocido en las filas de la guerrilla del Ejército Popular Revolucionario (EPR) como “comandante José Arturo”.
La mañana de ayer los manifestantes marcharon a las oficinas de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHO), con destino al centro de la Ciudad, para exigir al Gobierno del Estado una mesa de negociación.
Yolanda Ruiz, vocera de la organización Corriente del Pueblo Sol Rojo, señaló que en la comunidad de San Miguel Copala, sus compañeros han sido desplazados desde hace mucho tiempo y siguen sin vivienda. A esto, agregó que no pueden solventar los gastos de sus familias y limitados en sus derechos humanos.
Indicó que exigen que se respeten las medidas cautelares para San Juan Copala, cuyos desplazados son motivo de disputa a golpes entre el Defensor de los Derechos del Pueblo de Oaxaca, Arturo Peimbert Calvo, y David Venegas Reyes “El Alebrije”. También demandan alto a la represión de San Blas Atempa.
Al mejor estilo de las novelas policíacas clásicas, obligado es preguntar a quién o a quiénes beneficia el crimen de los brotes de ingobernabilidad en la mártir Oaxaca; quién o quiénes la han convertido en un gran negocio multimillonario.
Es por demás lógico y natural concluir que los tres grandes beneficiarios de la ingobernabilidad en Oaxaca, son los ex gobernadores Diódoro Carrasco Altamirano, Ulises Ruiz Ortiz y Gabino Cué Monteagudo, ya que todos los conflictos conducen a ellos directa o indirectamente.
O de qué otra manera interpretar el hecho que, horas después del llamado del gobernador Alejandro Murat a todos los sectores productivos y organizaciones sociales a realizar un tequio por la ciudad de Oaxaca estallara, otra vez, la violencia,
El mandatario estatal invitó a todos los capitalinos, a salir a limpiar sus calles, retirar la basura y pintar las fachadas de los edificios y viviendas, con el fin de trasformar la imagen de la capital para recibir a los turistas durante los festejos de La Guelaguetza.
Al mismo tiempo, se comprometió que su gobierno pondrá los botes de pintura que sean necesarios y llamó al pueblo y a los diferentes sectores a participar con la mano de obra para que “juntos cambiemos la imagen de la ciudad”, expuso.
En la presentación oficial de las fiestas de La Guelaguetza, celebrada en el teatro Macedonio Alcalá, Murat Hinojosa, refirió que es tiempo que sus ciudadanos hagan algo por su ciudad y los instó a participar en un gran tequio popular el próximo sábado 08 de julio para limpiar y mejorar la imagen de la capital.
El gobernante oaxaqueño estimó que durante los días de las fiestas de La Guelaguetza la ciudad de Oaxaca pueda obtener una derrama económica de 310 millones de pesos, que representará una bocanada de aire fresco para reactivar la economía del mercado interno.