La Jornada.
Ciudad de México. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) inició una queja de oficio con respecto al socavón que se abrió el 12 de julio en el Paso Exprés de la carretera México–Acapulco, en el tramo que cruza la ciudad de Cuernavaca, Morelos, para determinar la existencia de violaciones a los derechos humanos en que podrían haber incurrido autoridades, tanto federales como estatales, en su posible prevención, así como en la respuesta y atención que brindaron a las víctimas una vez que ocurrieron los mismos.
Con el fin de obtener datos e indicios que fortalezcan su investigación, envió visitadores adjuntos que ya están en el lugar de los hechos y ha iniciado el proceso de solicitud de información a las autoridades de los distintos niveles de gobierno involucradas en los hechos, explicó el organismo a través de un comunicado.
La CNDH le demandó a las autoridades correspondientes el pronto esclarecimiento del caso y que se realice una investigación rápida, objetiva e integral, que permita deslindar las responsabilidades que, en su caso, procedan, además de implementar las acciones necesarias para restablecer el paso de vehículos en la vía afectada, garantizando la seguridad e integridad de quienes transiten por la misma, así como de las personas que habitan en la zona en que se presentaron los hechos.
