Excélsior.
Ciudad de México. 214 días de que fue detenido en el Hotel Torre Trump, en la capital de Panamá, Roberto Borge Angulo, exgobernador de Quinta Roo, será extraditado este jueves a México, al ser requerido por cuatro delitos: uno del fuero federal –lavado de dinero u operaciones con recursos de procedencia ilícita– y tres del fuero común, que son aprovechamiento ilícito del poder, desempeño irregular de la función pública y peculado.
El delito federal, por el que lo requiere la Procuraduría General de la República (PGR), involucra 25 inmuebles con un valor de cinco millones de pesos.
l originario de San Miguel de Cozumel, Quintana Roo, fue blanco de señalamientos de corrupción durante toda su administración, entre ellos la adquisición de un reloj Richard Mille, de dos millones 100 mil pesos, o la compra de yates y propiedades con campo de golf, que no parecían compatibles con su sueldo como gobernador.
Borge Angulo se convirtió en el gobernador más joven, al asumir el cargo con tan solo 30 años el 5 de abril de 2011, después de ganar las elecciones como candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Muy joven inició su carrera política, a los 23 años, gracias a su parentesco con empresarios como Kamel Nacif Borge, “El rey de la Mezclilla”, o políticos que incluso gobernaron esa entidad, como Miguel Borge Martín.
Ocupó la titularidad de la Secretaría de Desarrollo Social, la Tesorería General estatal, la Oficialía Mayor de gobierno, la Presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI, e incluso fue diputado federal.
Durante su gestión, la deuda del estado pasó de mil 300 millones de pesos a 11 mil 500 millones de pesos.
Sus problemas comenzaron al darse a conocer operaciones irregulares de compraventa de terrenos e inmuebles por debajo de su precio, en beneficio de amigos, funcionarios y familiares, entre ellos su madre.
Las propiedades se ubican en los municipios de Playa del Carmen, Tulum, Solidaridad, Isla Mujeres, Cozumel, Benito Juárez, Bacalar y Othón P. Blanco.
Las acusaciones lo llevaron a huir de la entidad y del país, pues era buscado por el gobierno de Quintana Roo y la PGR que, a través de la Interpol, logró su detención el 4 de junio de 2017 en el Hotel Torre Trump, en Panamá, un día antes de que tomara un vuelo a Paris, Francia.
Se espera que Borge llegue este jueves alrededor de las 13:00 horas al hangar de la PGR del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, en condiciones de extradición.
Borge será presentado ante un juez federal de Nezahualcóyotl, Estado de México, para enfrentar las imputaciones que le hace la PGR por lavado de dinero.
Se espera que por la tarde de este jueves el exmandatario estatal comparezca ante Enrique Beltrán Santés, Juez de Control del Centro de Justicia Penal Federal del Estado de México, en Nezahualcóyotl, en una audiencia que podría extenderse hasta la noche, y en la que el Ministerio Público solicitará la prisión preventiva por riesgo de fuga.
Esto a pesar de que Borge Angulo cuenta con una suspensión que impide ejecutar la orden de aprehensión por lavado de dinero que obtuvo la PGR en meses pasados.
Se perfila que durante la diligencia donde se cumplimente la orden de aprehensión por delitos federales en contra de Borge, su equipo legal solicite la ampliación del plazo constitucional de 72 a 148 horas.
De esta forma, sería hasta en los próximos días cuando dicho órgano del Poder Judicial de la Federación resuelva la situación jurídica de Borge.
Mandatario caído
Quien fuera gobernador de Quintana Roo se une a la lista de políticos detenidos e investigados por corrupción.
Roberto Borge Angulo tiene 39 años de edad.
Como candidato del PRI, fue electo gobernador de Quintana Roo, cuando tenía 30 años, para el periodo 2011-2016.
Enfrentó diversas acusaciones de corrupción, que lo llevaron a huir del país.
El 4 de junio del 2017 fue detenido en un hotel de la capital de Panamá cuando estaba a punto de viajar a París.
La PGR consiguió su extradición, que hoy se concretaría.
Borge enfrenta cuatro acusaciones. La primera es por el delito federal de lavado de dinero.
Las otras tres, por aprovechamiento ilícito del poder, desempeño irregular de la función pública y peculado