Forbes.
Ciudad de México. Las fotos y entrevistas de funcionarios mexicanos o sus familiares en revistas del corazón constantes durante el sexenio de Enrique Peña Nieto y la presencia de un integrante del equipo de Andrés Manuel López Obrador en la portada de la revista ¡Hola! representa la continuidad a una estrategia de comunicación que banaliza la política mexicana y genera molestia entre la población, coincidieron observadores.
“En términos de la austeridad republicana y lo que ha sido el punto de partida del banalismo, de la superficialidad del gobierno de Enrique Peña Nieto, es evidentemente una contradicción muy severa a todo este discurso, incluso a la expectativa que tiene la gente de que cambien estas formas telenoveleras de hacer política”, apunta Alfredo Paredes, CEO de Capitol Consulting&Comunication.
Este martes la portada de la edición mexicana de la revista de origen español ¡Hola! -que se enfoca en información de figuras de la realeza europea, integrantes de la socialité y celebridades- publicó una foto de la boda entre Cesar Yáñez, previsto como coordinador general de Política y Gobierno para la administración de AMLO, y Dulce Silva Hernández.
La cobertura informativa de la boda, que se llevó a cabo en Puebla, se despliega en 19 páginas de la revista en las que se detalla el número de invitados, el diseñador que confeccionó el vestido de la novia y pormenores del festejo.
Este acto de ventilar eventos privados de los integrantes de la política, son justamente los detalles a los que la ciudadanía mexicana dio la espalda con el apoyo a la candidatura de AMLO, señala Alfredo Paredes.
“La oposición criticaba este estilo spotero de Enrique Peña Nieto de comunicarse, del estilo de vida de los políticos de restregarlo a la gente y pensar que esto generaba simpatía, esta vida de glamour al gobierno, precisamente fue degradando la política la administración y representando un déficit para Peña Nieto, de confundir lo que debe de ser la imagen del gobierno con estas acciones mediáticas”, advierte Paredes.
En opinión del experto en comunicación estratégica es posible que la publicación obedezca a dos intenciones: un cabildeo de la revista y la plataforma de prensa de la que forma parte, o una “novatada” integrada por fuerzas políticas opositoras al gobierno entrante.
“El gran riesgo que yo veo en términos de comunicación político es que esos actores de comunicación fallida del Presidente Peña quieran nuevamente subirse a la palestra, seguir influyendo, ser parte de la comunicación del gobierno, ser protagonistas de un nuevo estilo de publicación igual de superficial y banal”, dijo el experto en imagen pública.
Aunque Yáñez no ostenta aún ningún cargo público, la delicadeza de la publicación en la que es protagonista reside en que uno de los pronunciamientos más claros de la sociedad con la “contundente” victoria de AMLO el pasado 1 de julio era la de regresar seriedad a la clase política del país, afirma Paredes.
Cesar Yáñez es identificado como “el inseparable de AMLO” toda vez que lo ha acompañado durante 22 años de carrera política y se incorporó como su vocero de sus campañas presidenciales desde 2006.
Yáñez ha tratado de mantener una imagen discreta ante los medios de comunicación, sin embargo, en octubre de 2016 obtuvo notoriedad luego de que su entonces novia, Dulce Silva Hernández, fue detenida por cargos de mantener operaciones con recursos de procedencia ilícita en modalidad de ocultamiento de bienes.
