La Jornada.
Ciudad de México. El costo anual por el desperdicio de alimentos en México asciende a 25 mil millones de dólares, de acuerdo con datos del Banco Mundial (BM).
Richard Swannell, director de WRAP Global, manifestó, en el contexto del Foro Global Alimentario 2018, organizado por el Consejo Nacional Agropecuario (CNA), que el organismo reportó en diciembre pasado que en el país se desaprovechan unas 20 millones de toneladas de alimentos al año, principalmente verduras, frutas y productos de pan.
En entrevista, detalló que el desperdicio de alimentos en México no está identificado totalmente, es decir, el desaprovechamiento sucede en varios momentos de la cadena de suministro, desde la producción hasta que llega al consumidor.
El especialista señaló que el costo total a escala mundial por el desaprovechamiento de alimentos es de alrededor de 940 mil millones de dólares, cifra que, dijo, es equivalente a dos veces más los ingresos de la cadena de tiendas de autoservicio estadunidense Walmart.
Indicó que esa cifra equivale a cerca de mil 300 millones de toneladas, las cuales podrían caber en el territorio de China.
El crecimiento poblacional
Comentó que ese fenómeno se ha originado por el crecimiento poblacional en el mundo, sobre todo en países asiáticos, pues tienden a consumir más alimentos del hemisferio occidental.
Aseguró que por cada dos toneladas de alimentos que se producen en el mundo, una se desperdicia.
Consideró que es importante evitar el desperdicio de alimentos con políticas que procuren producir alimentos saludables y tengan menor impacto negativo en el mundo.
Sostuvo que en la Unión Europea se lleva a cabo un control para conocer en qué lugares se desperdician más los alimentos y con ello evitarlo. Ejemplificó que en Reino Unido se ha detectado que frutas, vegetales y panadería también son los productos alimentarios que más se tiran.
Subrayó que, a diferencia de México, se ha encontrado que en ese país los alimentos se desperdician en hogares, mientras en naciones en vías de desarrollo se conoce que el fenómeno ocurre más en la agricultura y en la transformación.
Se ha concluido, dijo, que mientras las naciones se urbanizan más e invierten en cadenas de suministro, se reducen el desaprovechamiento de productos alimentarios.
Po otra parte, durante la clausura del foro, Bosco de la Vega, presidente del CNA, indicó que es importante reducir la edad promedio de las personas que trabajan en el sector agroalimentario, pues la mayor parte de la población dedicada a esa actividad en el país es de 60 años, por lo que es importante que jóvenes se integren.