La Jornada.
Ciudad de México. Hasta ahora ningún empresario ha impugnado la decisión de cancelar la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional, pero si alguno “presentara un amparo o cualquier otro recurso legal, nosotros lo combatiremos en términos del planteamiento que hizo el presidente electo”, afirmó Julio Scherer, próximo consejero jurídico de la Presidencia, al término de un desayuno con Andrés Manuel López Obrador, donde analizaron la situación que ha generado el anuncio, así como agenda legislativa.
En el encuentro realizado en la casa de la transición, los coordinadores parlamentarios de Morena, Mario Delgado y Ricardo Monreal, expresaron al presidente electo el respaldo total de la bancada a la decisión de trasladar la obra a Santa Lucía; y de acuerdo con el senador Monreal, López Obrador está “muy tranquilo, sereno”, a pesar del desplome del peso y de la Bolsa Mexicana de Valores.
Zoé Robledo, próximo subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación -quien también asistió, junto a la futura titular de la dependencia, Olga Sánchez Cordero-, confió que la situación se tranquilizará. “Desde luego qué hay intereses que siempre se mueven en uno u otro sentido, pero estábamos viendo -comentó el diputado Mario Delgado- que el peso se devaluó más en 2014, cuando se canceló el tren México- Querétaro. Aquí el tema es dar seguridad, y no hay nada que dé más confianza a los mercados que saber que se va a combatir la corrupción, que no volverá a pagarse un moche, un soborno o una compensación.
“Queremos vivir en un Estado de derecho y eso se empieza acabando con la corrupción”, manifestó.
Señaló que aunque la Bolsa cayó cuatro por ciento, “no hay preocupación… es un movimiento todavía muy controlable”.
Resaltó que los mercados durante todo este sexenio han tenido fluctuaciones muy grandes; “claro que en los ajustes un planteamiento de esta envergadura genera movimiento porque hay intereses que están tocados, pero de verdad lo que más vamos a ofrecer y para eso estamos trabajando, es seguridad de que ningún empresario, por pequeño o grande que sea, va a tener que enfrentar nuevamente a un Estado mexicano que su régimen se sostenía en la corrupción. Eso es lo que en el largo plazo va a dar más confianza”, dijo.
Por su parte, Julio Scherer resaltó el ofrecimiento de López Obrador de que se respetarán los contratos de los inversionistas, por lo cual “no prevemos amparos”.
Descartó en breve entrevista que sean necesarias nuevas licitaciones. “Lo que se está ofreciendo a los contratistas es que vayan a trabajar a Santa Lucía”, manifestó Scherer y récordó que los responsables del proyecto dialogan con empresarios.
El coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, indicó que en el desayuno trataron el tema del aeropuerto, el desplome de la Bolsa Mexicana de Valores, además de las 19 prioridades legislativas, y sostuvo que el presidente electo “respetará a los empresarios y a quienes estén en desacuerdo con esta medida. Pero la medida va a seguir adelante, y nosotros como coordinadores de grupos parlamentarios hemos venido a decirle que cuenta con nosotros.
“Lo vimos muy tranquilo, muy claro en el propósito que se tiene y obviamente respetando las reacciones del sector económico y del sector empresarial y previendo que así va a ser todo el gobierno, de consulta a decisiones importantes en materia económica, en materia social. Las principales decisiones fundamentales del país van a ser consultadas, como lo fue el aeropuerto”, resaltó.
Al insistirle sobre la incertidumbre entre inversionistas, el senador reiteró que “se va a hablar con ellos, están garantizadas las inversiones; no se va actuar de manera irracional en la búsqueda de estas alternativas, de Santa Lucía, la ampliación del aeropuerto de la Ciudad de México y el del Estado de México (Toluca).
“No hay ninguna razón para que los inversionistas puedan estar nerviosos, no hay ninguna razón para expresar prácticamente un desconcierto total… los mercados van a regresar a su nivel de estabilidad. México está estable”.
Luchar contra la corrupción, abundó, “no genera inestabilidad; luchar contra círculos de poder arcaicos tampoco es inestabilidad. Creo que a la larga, en el corto plazo y en el mediano plazo, las decisiones que se están tomando serán benéficas para la nación”.
