La Jornada
Los diputados federales avalaron en lo general y en lo particular modificaciones a la reforma educativa que se estancó en el Senado de la República el pasado 30 de abril. Con los ajustes hechos en San Lázaro, poco después de la medianoche, la minuta será enviada nuevamente al Senado donde se discutirá este jueves en periodo extraordinario.
Tras 13 horas de sesión, en la que hubo dos recesos, para dar pie a su discusión en Comisiones Legislativas, los diputados avalaron el dictamen en lo particular con 389 votos a favor, y 60 en contra del PAN, así como votos en ese mismo sentido de Jorge Corona del Partido Verde, y los priístas Enrique Ochoa, Iliana López y María Alemán.
José Ángel Pérez del PES y Frida Esparza del PRD, votaron en abstención.
Luego de desechar unas 30 propuestas de modificaciones en la discusión de los artículos reservados por distintas fracciones, el Pleno aprobó sólo una modificación en la redacción a propuesta por el PRI.
En el único cambio que avanzó en la discusión de las reservar se estableció dentro de su artículo décimo quinto transitorio en el que, para cumplir con la obligatoriedad de la educación superior, señala que se incluirán los recursos necesarios y, “adicionalmente”, se establecerá un fondo federal especial que asegure a largo plazo los recursos “necesarios para garantizar la obligatoriedad de los servicios a que se refiere el artículo”.
Originalmente, indicaba que, “de igual forma” se establecería un fondo federal especial con recursos “crecientes para la prestación de estos servicios”.
En la minuta que será enviada al Senado se establecieron cambios respecto a la propuesta que avaló la Cámara de Diputados en abril. Entre ellos, define que será el Estado quien tengan la rectoría del control educativo.
Mientras se discutían las reservas presentadas por las distintas fracciones, los coordinadores de las bancadas de Morena, PRI, PRD, PT, PES, Movimiento Ciudadano, y Verde Ecologista, que votaron en su mayoría a favor en su discusión en lo general, ofrecieron un mensaje en conjunto en el que defendieron la legalidad del proceso legislativo, luego de que el PAN argumentó que presentaba vicios.
Por parte del PRI, su coordinador, René Juárez, destacó la eliminación de la parte punitiva que contenía la reforma avalada en 2013 impulsada por su partido.
Afirmó que los maestros no buscan evadir una evaluación, sino “que se les ponga una pistola con la amenaza de ser despedidos”, y dijo que con la nueva reforma educativa se corrige lo que había que ajustar.
El líder de la fracción del partido Verde Ecologista, Arturo Escobar, también consideró un avance eliminar el contenido punitivo, y agregó que en los países donde sus reformas educativas han derivado en una “educación de calidad”, la clave no sólo ha sido un cambio constitucional, sino también “la letra chiquita” en las leyes secundarias.
Al concluir la discusión de la reforma educativa, los diputados federales cerraron el periodo extraordinario que dio inicio este miércoles por la mañana.
