La Jornada
Ciudad de México. Un juez penal giró una orden de aprehensión contra Gonzalo Gil White –hijo del ex secretario de Hacienda Francisco Gil Díaz– por los delitos de abuso de confianza y administración fraudulenta de más de 750 millones de pesos de Oro Negro, empresa emblemática de la reforma energética del gobierno anterior. Además, se siguen otras cuatro líneas de investigación en su contra por desvío de recursos millonarios.
En una audiencia privada la madrugada de este miércoles en la Unidad de Gestión Judicial número 12 del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, el togado solicitó también la captura de otros directivos de la firma, como Alonso del Val Echeverría, Carlos Enrique Williamson Naso, José Antonio Cañedo White –sobrino del ex secretario de Hacienda en la época de Vicente Fox– y Miguel Ángel Villegas Vargas, quienes ya son buscados por policías de investigación de la Procuraduría General de Justicia.
De acuerdo con la indagatoria, desviaron recursos del fideicomiso F-695 de Deutsche Bank e hicieron disposiciones ilegales por más de 750 millones de pesos, por conducto de sus empresas Perforadora Oro Negro SA de CV e Integradora de Servicios Petroleros Oro Negro SAPI de CV.
Gil White, Del Val Echeverría, Villegas Vargas, Cañedo White y Williamson Nasi controlaban mediante cargos directivos y de administración a ambas empresas, por lo que realizaron esos movimientos sin problemas en detrimento de sus inversionistas extranjeros, a quienes no pagaron las deudas contraídas.
La empresa, que buscaba aprovechar los beneficios de la apertura del mercado petrolero a partir de la implementación de la reforma energética, fue declarada oficialmente en quiebra en junio pasado, de acuerdo con una sentencia emitida por el juzgado segundo de distrito en materia civil.
Su operación comenzó en septiembre de 2015 con Petróleos Mexicanos (Pemex), su único cliente, a fin de proveerle plataformas petroleras para actividades de exploración y producción en aguas someras y profundas. Operaba de forma permanente en el golfo de México y contaba con maquinaria para hacer perforaciones en los campos que le eran asignados.
En su código de ética ostentaba mantener los mayores niveles de productividad para el negocio petrolero, contar con personal íntegro y siempre bajo la ley. Según sus cifras, contaba con un capital de 44 mil millones de dólares para operaciones, y sus contratos con Pemex llegaron a ser hasta de mil 500 millones de dólares.
Gil Withe era director general y Cañedo White –hijo del cofundador de Televisa, Guillermo Cañedo– era presidente del consejo de administración. Como presidente del comité ejecutivo y miembro del consejo de administración fungía Luis Ramírez Corzo, quien fue director de Pemex entre 2004 y 2006.
Según fuentes extraoficiales, se tienen cinco líneas de investigación en su contra por desvíos de recursos en perjuicio de sus inversionistas y de las administradoras de fondos para el retiro que invirtieron para capitalizar a las empresas que firmaron contratos con Pemex cuando Emilio Lozoya era su director.
