La Razón
Túmin significa dinero en totonaca y con el espíritu de promover intercambio entre campesinos, artesanos, cocineras y otros prestadores de servicios se comenzó a usar en 2015 en Teotitlán del Valle, Oaxaca.
A cuatro años, se sigue impulsando como moneda alterna, principalmente en tianguis: sin estar fuera de la ley, explicó la artesana textil, Aurora Bazán, a medios en Oaxaca.
Es una tarjetita impresa que, previo acuerdo, representa una manera de obtener vegetales, frutas, maíz, café o servicios que proveen quienes la usan.
En la página web www.tumin.org.mx explican que este “se imprime por tirajes de 50 mil Túmin, correspondientes a 100 nuevos adherentes. Cuando se terminan las 100 inscripciones, se imprimen otros 50 mil, y así sucesivamente, de 100 en 100 socios”.
De acuerdo a la información proporcionada en la sección de “preguntas frecuentes” del sitio de Internet, hasta ahora son alrededor de mil 200 tumistas y sólo hay 9 tirajes; “porque lo damos en dos o más partes y por eso alcanza momentáneamente para más gente, pero después habrá que completarles”, detalla.
Según Presente Diario, los viernes en el municipio de Villa de Zaachila, zona metropolitana de Oaxaca, se instala el tianguis donde prevalece el trueque y se realiza con Túmin.
¿Cuál es su diferencia del capitalismo?
Entonces, en esto de los precios en pesos, “no se libra del capitalismo, a menos que tuviéramos un sistema de valores propio y más justo, no basado en el lucro o la especulación”, aclaran en su sitio.
“Pero hay otros aspectos en donde el Túmin no es capitalista: no es una mercancía como el peso, es un instrumento de intercambio que no genera interés ni plusvalía en las transacciones comerciales; no es para hacer negocio sino para satisfacer necesidades; no es de competencia sino de cooperación y ayuda mutua; no es de seguridad sino de confianza; no es para acumular sino para circular; no es indispensable como el peso, sino que te invita al trueque y al convite, a la gratuidad; sí confunde la amistad con el negocio; no es obligatorio como el peso, sino libre y rebelde; no es controlado por un dueño del dinero, sino que todos los tumistas son dueños, es comunitario, es de todos; no nace del sistema, es autónomo; no es de clientes, es de compañeros”, detallan.
