La lucha contra la pandemia del COVID-19, que actualmente afecta a varios países del mundo incluyendo México y Oaxaca, ha fortalecido la forma de organización y unión comunal de muchos pueblos originarios de Oaxaca, los cuales han decidido solidarizarse en acciones coordinadas altamente efectivas para hacer frente a esta contingencia global.
Un ejemplo de ello es la comunidad de Totontepec Villa de Morelos, ubicada en la región Mixe de la Sierra Norte de Oaxaca, que gracias a su gran capacidad de organización ha podido detener la llegada de la epidemia, por lo que entre sus habitantes no existe ningún caso de contagio por COVID-19.
Al ser un municipio regido por usos y costumbres -Sistemas Normativos Internos- se establecieron acuerdos entre la autoridad municipal y los pobladores para que, a través del tequio -ayuda mutua-, se implementaran medidas preventivas para evitar contagios del virus entre sus habitantes y reforzar las acciones de “Yo me guardo por Oaxaca”, que busca cumplir con el aislamiento social total y voluntario para evitar casos o fallecimientos por COVID-19.
El presidente municipal, Toribio Bravo Reyes, mencionó que a raíz de que se confirmaron los primeros casos de COVID-19 en la región, junto con su cabildo llegaron al acuerdo de establecer un filtro sanitario en la entrada del pueblo, al cual denominaron “El campamento”, en donde desinfectan y revisan cada unidad de transporte que ingresa a la comunidad, pero también para invitar a las personas a respetar las medidas sanitarias de prevención correspondientes.
“La gente le puso El campamento, porque aquí cocinamos, preparamos café, agua de sabor, pero al mismo tiempo cuidamos a nuestro pueblo; al principio algunas personas que pasaban o los taxistas se enojaban, pero ya después entendieron. Porque nosotros no les negamos el acceso, solo desinfectamos sus unidades”, dijo el edil de la comunidad.
El filtro se encuentra activo las 24 horas del día, los siete días de la semana y para su atención se organizaron dos turnos: uno cubre todo el día y otro la noche. Las guardias están a cargo de personas voluntarias y miembros del cabildo, incluyendo el presidente municipal.
“Yo tengo que poner el ejemplo y así deber ser en cada pueblo, para que la gente vea que somos responsables y se sumen a la iniciativa. Entre todos nos ayudamos, así las cosas funcionan mejor”, señaló Bravo Reyes.
Esta comunidad también decidió restringir el acceso a vehículos de empresas trasnacionales que comercializan comida chatarra, refrescos y bebidas alcohólicas, permitiendo solo el paso a comerciantes locales y aquellos que venden productos de primera necesidad como frutas, verduras, abarrotes y lácteos, entre otros; esto con la finalidad de reducir la movilidad pero también como una acción de cuidar la salud de las personas.
“Afortunadamente la gente ha entendido la gravedad del problema, y eso nos ha ayudado mucho. Desde las 6 de la tarde nadie transita por las calles, de igual manera en las agencias municipales han instalado sus propios filtros para protegerse y los pueblos vecinos al conocer de estas acciones también han tomado conciencia de la problemática y realizan sus propias estrategias”, expresó el Presidente Municipal.
Asimismo, por las mañanas y las noches en el aparato de sonido del palacio municipal se anuncian las medidas básicas de higiene, de prevención y se informan a las personas sobre la situación de la pandemia en México. Esto se realiza tanto en español como en mixe, la lengua originaria de la comunidad.
“Hasta la fecha, todas las acciones que se han realizado han servido porque no ha llegado el virus a la población y la gente está tranquila, pero esta situación va para largo, así que no podemos bajar la guardia y tenemos que seguir con las medidas de prevención”, finalizó la autoridad municipal.