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El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) presumió que su gobierno tiene una buena relación con la iniciativa privada, pero reiteró su discurso en contra del tráfico de influencias.
“Estamos a favor de los hombres de negocio y de las ganancias razonables; estamos en contra de la corrupción”, declaró el mandatario en un video difundido en su cuenta de Twitter.
El presidente citó el acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá, T-MEC, que alcanzaron en conjunto con los empresarios mexicanos y que firmó en julio con el presidente Donald Trump.
El político tabasqueño recordó el aumento salarial de 20% que logró con los empresarios durante diciembre de 2019, además de una reforma al sistema de pensiones que sigue discutiéndose en el Congreso.
Pero la iniciativa privada ha tenido múltiples choques con su administración
Por ejemplo, la cancelación de rondas petroleras y subastas eléctricas con compañías energéticas en diciembre de 2018, además de cambios administrativos en materia energética para beneficiar a las empresas estatales Pemex y CFE y limitar la participación privada.
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Otro botón de muestra fue la cancelación de la planta cervecera de la empresa Constellation Brands en Baja California durante marzo de este año, por presunto tráfico de influencias para obtener permisos en una zona donde escasea el agua.
El desencuentro más reciente ocurrió durante los primeros días de agosto con la prohibición de comida chatarra a menores de edad en Oaxaca, el estado con más pobreza del país. La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) calificó este hecho como un golpe a la “libertad comercial” que promoverá la informalidad.
Sus declaraciones aparecen tres días antes de su segundo informe de gobierno, en medio de la peor crisis económica que ha vivido el país por la emergencia sanitaria de Covid-19.
