Forbes
Los hoteles de Huatulco sufrieron una caída del 67% de ingresos durante 2020, a causa de una ocupación aproximada del 30% durante un año marcado por la pandemia de Covid-19, en comparación con el 2019.
Ante una paralización total de más de cuatro meses que los obligó a recortar el 50% de sus empleados, la Asociación de Hoteles de Huatulco planea apostar por el turismo interno proveniente de Chiapas, Tabasco, Oaxaca, Veracruz, e incluso Tijuana.
“Estamos iniciando una promoción y actividades con ellos, luego de que en diciembre tuvimos la apertura de hasta de un 75% de ocupación, hoy nos la han bajado nuevamente al 30%”, explicó Gustavo Ficachi, Presidente de la Asociación de Hoteles de Huatulco y Director del Hotel Binniguenda en entrevista para Forbes México.
El directivo de la asociación destacó que a pesar de que Huatulco es uno de los 15 destinos más importantes del país, se mantuvo en el primer lugar de menos contagios por Covid-19 gracias a los protocolos en hoteles y el municipio, actualmente se encuentra en segundo lugar después de Isla Mujeres.
El destino turístico espera una recuperación de los niveles de 2019 para 2022 o 2023, sobretodo por la disminución drástica del turismo canadiense que registraba en promedio la llegada de 18 a 20 aviones a la semana durante los meses de octubre, noviembre y abril.
Con la llegada del Covid-19, cada semana se permitió un vuelo a la semana proveniente de Canadá y con el semáforo rojo actual, el próximo vuelo que se recibirá será el 31 de mayo.
De igual forma, la paralización de actividades en la Ciudad de México marcadas por el semáforo rojo epidemiológico frenó a los turistas de esta zona a continuar viajando.
“Nuestro emisor número uno para Huatulco es la CDMX por vía aérea y a partir del semáforo rojo las cancelaciones se llevaron a cabo todos los días y en todo momento, fue lo más fuerte que atravesamos”.
El destino que cuenta con nueve bahías y 36 playas externó que la compra de caretas, guantes, cubre bocas, gel y arcos sanitizantes es “un gasto desmedido” que no estaba contemplado, tras las grandes pérdidas de la industria hotelera y con el nulo apoyo de las autoridades.
“No ha habido apoyo por parte del gobierno federal, sólo algunos incentivos del estado de no pagar el impuesto sobre el hospedaje cosa que no se tendría que pagar porque no tenemos cuartos ocupados, pero no se ha tenido nada, nos avisaron que nos teníamos que rascar con nuestras propias uñas y así lo estamos haciendo”, finalizó Ficachi.