Un nuevo caso de machismo en Morena provoca un terremoto político en Oaxaca

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El País

Con la hoguera de Félix Salgado Macedonio humeando todavía en el horizonte, un nuevo caso de machismo ha cimbrado a Morena, esta vez en Oaxaca. En un comunicado divulgado este fin de semana, decenas de mujeres activistas de diferentes regiones del Estado exigen al partido que niegue la candidatura a diputado a Humberto Santos. Las mujeres denuncian que Santos creó y administró un grupo de WhatsApp, “Sierra XXX”, donde él mismo animaba a compartir fotos íntimas de mujeres ayuujk.

En el comunicado, las mujeres argumentan que “la creación de este chat con estas características y su llamado a compartir en ese espacio fotos de mujeres indígenas de la región para que un grupo de hombres haga comentarios sobre sus cuerpos evidencia una deleznable normalización de la violencia de género”. Por esta razón, exigen que Morena “impida su participación en el proceso de postulación”. Santos aspira a una asiento en la Cámara de Diputados local.

Aunque apenas ha alcanzado la esfera nacional, el caso del chat ha sido motivo de polémica desde hace un año. En marzo de 2020, la abogada oaxaqueña Sandra Domínguez denunció por primera vez la existencia del grupo, cuando supo que una imagen suya circulaba entre los participantes. En la foto aparecía ella junto a un hombre. Alguien había sobreescrito el signo del peso encima.

“A mí me pasaron capturas de pantalla donde salía mi foto”, cuenta Domínguez en entrevista con EL PAÍS. Eran imágenes de su propia foto en el chat, pero también de comentarios de hombres que participaban en el intercambio. “Yo denuncié aquello ante la fiscalía, presente las capturas y conté quiénes eran las personas que aparecían en el chat. Luego una persona que yo mencioné me llamó y me dijo que él no había creado el chat ni tenía nada que ver, que solo le habían añadido”, cuenta la mujer. Domínguez explica que esa persona señaló a Humberto Santos. La mujer consiguió pantallazos del chat donde aparecía el nombre del ahora precandidato a diputado.

Hace un año, el caso apenas afectó a Santos. Lejos del ruido electoral, el escándalo del chat golpeó sobre todo al Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI). El hombre que había compartido la foto de Sandra Domínguez era Rolando Vásquez, funcionario del instituto. Vásquez salió del INPI, pero negó toda culpa en una comparecencia ante los medios. Reconoció por primera vez la existencia del chat, incluso mostró la foto de Domínguez, pero no le pareció un problema. Más aún, señaló la “inmadurez política” de Domínguez por no saber encajar una broma.

El caso revive ahora, en plena precampaña electoral, con Santos en el centro de la diana. El precandidato a diputado ha comparecido este lunes ante los medios, acompañado de su esposa y su hija, para denunciar una campaña en su contra. “Niego categóricamente que yo haya creado cualquier grupo que trafique con fotos de mujeres desnudas de cualquier etnia. ¿Dónde están las supuestas víctimas? ¿Dónde están las denunciantes?”, ha criticado.

A Laura Morales, una de las firmantes del comunicado, la actitud de Santos no le sorprende. “Él quiere hacerlo ver como una cuestión política, pero no. Eso también deja mucho que desear. Nosotras no queremos que alguien así nos represente. Tomaban fotos de Facebook y las ponían y escribían comentarios misóginos. A muchas víctimas las han silenciado, no han podido denunciar por miedo”, critica.

Vecina del pueblo serrano de Ayutla, Morales lamenta el apoyo de cuadros locales de Morena a Santos. “Ellos lo minimizan. Personajes que estaban en ese chat incluso trabajaban en el INPI. El propio director del INPI minimizó el asunto. Y ahora el coordinador del INPI en Ayutla igual mandó un mensaje de apoyo a este personaje”.

El Comité Ejecutivo Estatal de Morena tiene hasta el 21 de marzo para definir las candidaturas. De momento, el partido no ha planteado un reemplazo para Santos. Lejos de eso, el líder estatal de la formación, Sesul Bolaños, trató de rebajar la denuncia contra Santos este domingo: “Es una campaña en contra del compañero. Son los ministerios públicos quienes determinarán si es o no culpable de los hechos que se le imputan. Nosotros no determinamos la culpabilidad de un compañero”.