Después de dos años de pandemia, nuevamente Oaxaca mostró al mundo su grandeza y hermandad a través de las cuatro presentaciones de la Guelaguetza, en la que celebró 90 años de esta tradición considerada el homenaje racial más importante de América Latina.
Fueron dos Lunes del Cerro con dos emisiones cada una en la que más de 48 mil personas celebraron la vida, la convivencia y la alegría de estar reunidos en un solo lugar, el auditorio de la Guelaguetza, y disfrutar de las costumbres y tradiciones de cada una de las regiones participantes en la esperada máxima fiesta de las y los oaxaqueños.
“Oaxaca hoy vibró y se hace más grande gracias a este gran regalo, nuestras tradiciones, nuestra diversidad, cultura e historia. Las y los oaxaqueños, nuestras familias y las delegaciones hacen grande esta fiesta”, expresó el gobernador del Estado, Alejandro Murat Hinojosa.
Asimismo, junto a su esposa, la presidenta honoraria del Sistema DIF Oaxaca, Ivette Morán de Murat; la actriz oaxaqueña Yalitza Aparicio; la titular de la Secretaría de Pueblos Indígenas y Afromexicano (Sepia), Edith Aparicio; el diputado federal por el Partido del Trabajo (PT), Gerardo Fernández Noroña, el gobernador del Estado de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez y el presidente de la Concanaco, Héctor Tejada, el Mandatario Estatal celebró la vida y el orgullo de ser oaxaqueño y llevar al mundo más de Oaxaca.
“Oaxaca lo tiene todo, van a encontrar una experiencia única porque somos un pueblo único, que tiene todo que ofrecer. Ha sido un éxito la Guelaguetza, hay una gran afluencia turística lo que representa una derrama económica de más de 500 millones de pesos”, declaró el Jefe del Poder Ejecutivo.
Con un foro totalmente lleno, se llevó a cabo este 1 de agosto la última emisión de la Guelaguetza. La Rotonda de la Azucena se llenó de júbilo, alegría y esperanza al bailar, cantar, oler y saborear la riqueza cultural de las 14 delegaciones asistentes, mismas que mostraron a México y al mundo, la grandeza de Oaxaca.
En esta última emisión, la fiesta comenzó con el llamado ¡Que inicie la Guelaguetza! del “viejo tiliche” -personaje fantástico de los carnavales de Putla Villa de Guerrero- y que se convirtió en un ícono oaxaqueño en la celebración de “Julio mes de la Guelaguetza” al ser parte de la imagen oficial de este año. Posteriormente, la Chirimía se presentó en el escenario para anunciar también el inicio de esta celebración.
Asimismo, portando orgullosamente su traje tradicional de Santo Domingo Tehuantepec, la diosa Centéotl, Jacsenic Maybeth Rodas González, dio la bienvenida a las y los oaxaqueños y turistas que ansiosamente esperaban la presentación de las delegaciones.
Al ritmo de los sones y chilenas de la tradicional calenda y carnaval de Putla Villa de Guerrero, el escenario se vistió de alegría al presentarse hombres y mujeres con su colorida indumentaria, así como los marmanos o viejos tiliches característicos del Carnaval de esta población, que con sus trajes hechos de pedazos de tela de colores alegres, sombreros de palma y máscaras de viejito hechas de paja y estropajo, cautivaron a los presentes.
De los Valles Centrales, la delegación de Tlacolula de Matamoros hizo la representación de su Mayordomía del Señor de Tlacolula, festividad patronal que se vive el segundo domingo de octubre. Nuevamente, se pudo conocer la tradición de la “Lavada de cabeza de los novios” que representó Huautla de Jiménez acompañado de sus sones mazatecos.
Con el paso de la tarde, las delegaciones animaban cada vez más a las y los espectadores, tal como lo hizo Miahuatlán de Porfirio Díaz con sus alegres sones, jarabes y fandango Miahuateco; continúo la región Mixteca con la Heroica Ciudad de Tlaxiaco, quien presentó sus sones y jarabes de Tlaxiaco.
A esta fiesta cultural y étnica, también asistió la delegación de El Espinal, de la región del Istmo, con su tradicional fiesta de barrio en honor a San Mateo, en el que mujeres y hombres lucieron sus ataviados trajes regionales que caracterizan a esta región. También, quienes mostraron su grandeza y orgullo de ser oaxaqueños, fue la delegación de Teotitlán del Valle, con la esperada “Danza de la Pluma”.
De la Sierra Sur, San Francisco Sola, de Sola de Vega se presentó con el Jarabe de la Rosa y chilenas, destacando en la indumentaria de las mujeres su blusa bordada en punto de cruz que refleja la belleza de la flora y fauna de la comunidad, así como una falda de percal floreado.
De pie, las y los asistentes menearon sus sombreros para recibir a la delegación de la Heroica Ciudad de Huajuapan de León y entonar la canción Mixteca de José López Alavés, que fue escuchada tanto en español como en la lengua Mixteca, posteriormente, disfrutaron de la interpretación del inigualable e insuperable “Jarabe Mixteco”.
El escenario del Cerro del Fortín, también vibró con la presentación del baile folclórico “Flor de Piña” de la delegación de San Juan Bautista Tuxtepec, en donde mujeres de la región del Papaloapan bailaron descalzas y en sincronía para deleitar con la majestuosidad de sus huipiles bordados la cultura mazateca y chinanteca.
Santo Domingo Tehuantepec maravilló a las y los visitantes a esta rotonda, con sus elegantes trajes regionales bordados a mano al presentar el Xhina Bido´ día del Xua´ ana y las capitanas en la mayordomía. No pudo faltar la Heroica Ciudad de Ejutla de Crespo, de los Valles Centrales con el “Jarabe Ejuteco” y sus versos picarescos.
La noche llegó en la celebración del 90 aniversario de la Guelaguetza y con ella, el final de la máxima fiesta de las y los oaxaqueños, sin antes presentarse las delegaciones de Santiago Pinotepa Nacional con sus sones, juegos y chilenas que invitaban a bailar y seguir disfrutando de la algarabía de la región de la Costa oaxaqueña.
Y las Chinas Oaxaqueñas de Genoveva Medina, quienes al ritmo de las notas del “Jarabe del Valle” interpretadas por la Banda de Música de Seguridad Pública de Oaxaca, acompañadas de marmotas, faroles, cohetones y toritos cerraron la última emisión de la Guelaguetza 2022, dejando con ello esperanza de volverse a reunir el próximo año en este mismo escenario y seguir mostrando al mundo la riqueza cultural, gastronómica, musical y dancística que posee Oaxaca en cada una de sus regiones.