Alfredo Martínez de Aguilar
No le falta razón al líder universitario que logró la autonomía universitaria porque por su inmensa cultura, convertir a Oaxaca en la Atenas de México, ha sido el sueño de muchos humanistas oaxaqueños.
Al participar en la presentación de la cuarta edición de “Oaxaca: Espacios Culturales”, Raúl Castellanos, reiteró lo que ha planteado siempre, Oaxaca debe ser la capital mundial de la cultura y el arte en México.
Guillermo García Manzano “hace posible que los oaxaqueños y las sociedades del mundo no perdamos la memoria histórica de lo que representa nuestro mágico, señorial y eterno estado de Oaxaca”.
El mayor intento serio lo realizó el Gobernador Pedro Vásquez Colmenares, político culto, amante de la oratoria y de la música, extraordinario pianista, incansable promotor de diversos proyectos culturales.
Su mayor ilusión era convertir a la capital oaxaqueña en la moderna Atenas de México, a través de la instalación de diversas universidades, a semejanza de la capital poblana, en el vecino estado de Puebla.
Durante su mandato se creó la Orquesta Primavera de Oaxaca, que dirigieran grandes maestros como Rodolfo “Popo” Sánchez Vega, Eduardo Mata y Sergio Cárdenas, así como la Biblioteca Pública Central.
El mayor legado vigente de Vásquez Colmenares a lo largo de las últimas cuatro décadas en la difusión de la riqueza cultural del estado es la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión (CORTV).
Otro de los grandes proyectos culturales inéditos, sin precedente en la historia, fue el Festival Anual de Bandas, con la participación de dos mil bandas de las diversas localidades de las diferentes regiones.
“Oaxaca: Espacios Culturales”. Es lo más cercano a una “obra total” sobre nuestro esplendoroso estado, cuya pluralidad en todos sentidos -política, religiosa y hasta de amores- es única y e inabarcable.
García Manzano, con gran talento conjunta y conjuga la inmensa mayoría de nuestra historia, costumbres, recuerdos, personajes, regiones, leyendas, sitios emblemáticos, tradiciones, héroes, victorias, derrotas, anhelos, fiestas, cuentos, en suma, nuestra esencia.
Remite a momentos estelares de nuestras vidas, no alcanzaría el tiempo para referirlos. Raúl mencionó tres, el Eclipse de 1970, las fiestas de La Samaritana y la personalidad de los maestros Alberto Canseco Ruiz y Jorge Pérez Guerrero, íconos de la formación universitaria de varias generaciones.
Como cada edición, esta cuarta está enriquecida con nuevos apuntes de la influencia azteca y náhuatl en nuestros orígenes, nuevas leyendas, narrativas de aconteceres, la incorporación de los afrodescendientes y mestizos, personajes y momentos que la enriquecen y actualizan.
Pero hay algo mucho más relevante a destacar. En toda obra, además de la investigación, los datos duros, las versiones encontradas, hay algo fundamental, que yo resumiría en tres conceptos: el compromiso con la verdad histórica; el estilo de la narrativa, propio, único.
Y, sobre todo, la emoción, la adrenalina del autor, para plasmar en letras su visión de la realidad, sus sueños, ser un soñador, como diría John Lennon, sus utopías; y debo decirles, “Espacios Culturales” es una utopía hecha realidad, subrayó el director general de Regeneración Pluralidad.
Coincidió con el ingeniero Alberto Bustamante Vasconcelos, la doctora María Luisa Acevedo Conde, Prometeo Sánchez Islas, quienes prologaron las tres ediciones anteriores y con Juan Pérez Audelo, quien prologa esta cuarta edición… Espacios Culturales… es una obra para la historia.
Hoy los tiempos modernos son complejos, las entrañas de Oaxaca están presentes más allá de la superficialidad de la selfie y los “me gusta”. Lo he planteado siempre, Oaxaca debe ser la capital mundial de la cultura y el arte, insistió el primer candidato del PRD a Gobernador de Oaxaca.
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