La Jornada
Al concluir la Cumbre de Líderes de América del Norte (CLAN), México, Estados Unidos y Canadá se comprometieron a intensificar la cooperación, consolidar las cadenas de suministro regionales, sustituir importaciones en el área y alcanzar una economía resiliente, que convierta a esta zona en la más competitiva del mundo, para lo cual crearán un comité de planeación y vinculación, informó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
GALERÍA: AMLO recibe a Biden y Trudeau en la Cumbre de Líderes de América del Norte.
El mandatario mexicano; el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, hablaron ante los medios al término de las conversaciones privadas y más tarde difundieron una declaración conjunta.
Por ambas vías reconocieron el carácter crítico que enfrenta el mundo en materia ambiental, lo que requiere acciones inmediatas. Acordaron actuar “rápidamente para acelerar la transición energética mediante la implementación de soluciones de energía limpia”.
Ante el desafío ambiental, las tres naciones impulsarán el aumento de la producción de vehículos de cero emisiones en América del Norte y la transición a combustibles más limpios. “En asociación con los indígenas, reiteramos nuestro compromiso de proteger la biodiversidad, trabajar para terminar con la deforestación y hacer nuestra parte para conservar 30 por ciento de la tierra y las aguas del mundo para 2030”.
Energía limpia
Biden afirmó que América del Norte debe ser una zona de energía limpia, para lo cual las tres naciones pueden convertirse en “líderes globales en la crisis del clima; eso significa trabajar conjuntamente para tener vehículos de cero emisiones, establecer estaciones de recarga de vehículos eléctricos que vayan de un lado a otro de nuestras fronteras internacionales; eso significa explorar mercado para energía a partir del hidrógeno”.
El mandatario mexicano hizo en su momento una clara referencia a la crisis política en Brasil: “Abro un paréntesis para expresar mi reconocimiento al primer ministro Trudeau y al presidente Biden, por la manera tan solidaria en que actuaron ante el intento de golpe de Estado en Brasil. Esto demuestra que hay un compromiso auténtico en favor de la democracia. Nuestro apoyo al presidente Lula”.
Al mismo tiempo, entre los acuerdos alcanzados destacó el fortalecimiento de las relaciones comerciales y económicas. Explicó que la creación del comité de expertos estará “destinado a la planeación y a la sustitución de importaciones en América del Norte para procurar ser cada vez más autosuficientes, así como hacer realidad el desarrollo, la cooperación y el bienestar de todos los países de nuestro continente”.
Añadió que en el encuentro los tres mandatarios abordaron con prioridad la integración económica y comercial de todo el continente, así como el bienestar de los pueblos y las nuevas relaciones de cooperación, “dejando atrás el intervencionismo hegemónico”.
Trudeau subrayó que la consolidación regional derivó del acuerdo comercial firmado hace casi 30 años, el cual permitió el crecimiento de “nuestras economías”. Subrayó que América del Norte tiene una población de 500 millones de personas con un producto interno bruto superior a la Unión Europea.
Sin embargo, alertó que recientemente se puso en duda la viabilidad del libre comercio regional, lo que generó incertidumbre para las inversiones. “Afortunadamente, la creencia en el comercio justo y libre ganó la batalla, renegociamos el acuerdo y se volvió mucho mejor. El mundo enfrenta gran incertidumbre con el surgimiento de líderes autoritarios que causan inestabilidad mundial, ademas de que el alto costo de vida agrega estrés a las familias”.
A su vez, en el documento conjunto se menciona el acuerdo de lanzar una versión actualizada del Plan Norteamericano para la Pandemia y la Influenza Animal con el fin de mejorar la prevención, preparación y agilidad y brindar una respuesta rápida a las emergencias sanitarias en América del Norte.
El documento incorpora el compromiso de emprender acciones trilaterales para combatir la discriminación y promover la diversidad, la equidad y la inclusión social. Los gobiernos “guiarán acciones a favor de comunidades históricamente marginadas y avanzarán en el acceso a bienestar y prosperidad para todas las personas a través de iniciativas regionales y de cooperación. Los tres países intercambiarán información para compartir buenas prácticas y estrategias para fomentar la equidad y la justicia racial en nuestras políticas públicas”.